La flotilla de ayuda que pretendía partir de Turquía rumbo a Gaza se retrasa luego de que Guinea Bissau retirara su bandera por presiones de Israel y EE.UU.
La Coalición de la Flotilla de la Libertad, compuesta por activistas de derechos humanos, abogados, médicos y enfermeras que se han unido para entregar ayuda directamente a Gaza, ha informado que el convoy de barcos no pudo zarpar después de que Guinea-Bisáu, un país del oeste de África, retirara su bandera de los buques.
“El Registro Internacional de Buques de Guinea-Bisáu (GBISR), en una acción descaradamente política, informó a la Coalición de la Flotilla de la Libertad que había retirado la bandera de Guinea-Bisáu a dos de los barcos de la flotilla, uno de los cuales es nuestro barco cargado con más de 5000 toneladas de ayuda para salvar vidas”, anunciaron los activistas.
La medida se produjo después de que las autoridades de Guinea-Bisáu aparentemente hubieran estado realizando varias solicitudes “extraordinarias” de información sobre destinos, posibles escalas portuarias adicionales, manifiesto de carga y fechas y horas estimadas de llegada.
Según los organizadores de la flotilla de ayuda, la decisión de Guinea-Bisáu y el posterior retraso del calendario de la flotilla es resultado directo de la presión de Israel y Estados Unidos.
Tres de los barcos de la flotilla permanecen atracados desde hace una semana en el puerto de Tuzla, en el sur de Estambul, mientras que tenían previsto zarpar el viernes.
El objetivo de la flotilla es “colocar firmemente el genocidio en Gaza en la agenda de los responsables de la toma de decisiones internacionales y de los Estados, y crear una fuerte iniciativa para poner fin a la agresión israelí y levantar el embargo sobre el territorio”, según afirman los activistas.
En 2010, una misión similar con barcos que transportaban a más de 600 activistas de más de 30 países llamó la atención mundial después de que Israel atacó el barco turco de la flotilla, el Mavi Marmara, dejando 10 personas muertas y 28 heridos a bordo.
Desde el 7 de octubre, el régimen de Tel Aviv ha matado al menos a 34 488 palestinos, en su mayoría mujeres y niños, y ha herido a otros 77 643 en su guerra genocida contra Gaza.
