Integrantes del movimiento popular yemení Ansarolá en Saná, la capital, 24 de noviembre de 2021. (Foto: AP)
Fuerzas leales al expresidente fugitivo yemení Mansur Hadi tiran la toalla y abandonan la ciudad de Harad, en la provincia de Hajjah (noroeste de Yemen).
Rashid Mabjut Maruf, el portavoz de los medios del quinto distrito militar del dimitido gobierno yemení, anunció el viernes que las fuerzas de la llamada coalición saudí contra Yemen y sus mercenarios han salido de Harad.
No obstante, Maruf alegó que esta medida se realizó por la presión internacional y no por los avances del Ejército yemení, apoyado por los comités populares.
Esto se produce mientras los observadores, citados por los medios locales, admiten que las fuerzas de la llamada coalición saudí han sufrido grandes pérdidas humanas y materiales en Harad.
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En momentos que las fuerzas yemeníes logran nuevos avances en diferentes zonas, más de 40 comandantes apoyados por Arabia Saudí han muerto en el noroeste de Yemen.
De hecho, durante las últimas horas, las fuerzas del Ejército yemení, apoyados por el movimiento popular Ansarolá, lograron avances significativos que les permitieron controlar varios sitios en Harad que estaban bajo el control de los mercenarios saudíes desde junio de 2018.
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Yemen, decidido a vencer
Es más, en fechas recientes, las fuerzas yemeníes han aumentado sus operaciones en distintas partes contra el frente enemigo para convertir en realidad su promesa, es decir, expulsar a los ocupantes de todas las provincias de Yemen.
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En este mismo contexto, el ministro yemení de Asuntos exteriores, Hesham Sharaf, advirtió el jueves a los agresores de que dejen de intervenir en su país asegurando que Saná se reserva derecho a defenderse ante agresiones.
