Ucrania está “viva y coleando” y nunca se rendirá, dijo el presidente Volodymyr Zelensky, en un desafiante discurso a los legisladores estadounidenses en su primer viaje al extranjero desde la invasión de Rusia.
La ayuda militar estadounidense a Ucrania no fue caridad, sino una inversión en seguridad para el futuro, dijo Zelensky.
Su apelación se produce en medio de señales de que es probable que el apoyo de Estados Unidos enfrente un mayor escrutinio por parte de los legisladores republicanos en el Congreso.
Pero el presidente Joe Biden prometió quedarse con Ucrania “todo el tiempo que sea necesario”.
Biden prometió un nuevo paquete de ayuda de $ 2 mil millones (£ 1.7 mil millones) y prometió otros $ 45 mil millones.
En una conferencia de prensa conjunta, Biden dijo a los periodistas que “no estaba preocupado en absoluto” por mantener unida a la coalición internacional.
En medio de las preocupaciones de que algunos aliados puedan estar sintiendo la tensión del costo del conflicto y la interrupción de los suministros mundiales de alimentos y energía, el presidente de Estados Unidos dijo que se sentía “muy bien” por la solidaridad del apoyo a Ucrania.
Como aliado más importante de Ucrania, Estados Unidos ya ha comprometido $ 50 mil millones (£ 41 mil millones) de asistencia humanitaria, financiera y de seguridad, mucho más que cualquier otro país.
Zelensky, vestido con su sudadera y botas verde combate, expresó su esperanza de que el Congreso apruebe $ 45 mil millones adicionales en ayuda a Ucrania, actualmente ante el Senado de los Estados Unidos, para “ayudarnos a defender nuestros valores e independencia”.
Los republicanos, que tomarán el control de la Cámara de Representantes en enero, han advertido que no emitirán un “cheque en blanco” para Ucrania.
De hecho, el apoyo republicano a la asistencia continua se ha ido erosionando. En una encuesta realizada en noviembre, poco más de la mitad de los votantes republicanos apoyaron la ayuda a Ucrania, frente al 80% en marzo.
Pero Zelensky, que viajó en un avión de la Fuerza Aérea de Estados Unidos desde la ciudad polaca de Rzeszow, dijo que “independientemente de los cambios en el Congreso”, creía que habría apoyo bipartidista para su país.
E hizo su súplica en términos emotivos ante una sesión conjunta del Congreso, un discurso que fue interrumpido 18 veces con ovaciones de pie por casi todos los miembros del Congreso, con la excepción de algunos legisladores republicanos que no aplaudieron.
Hablando en inglés, les dijo que su país seguía en pie “contra viento y marea” y predijo “un punto de inflexión” en el conflicto el próximo año.
Para ilustrar la brutalidad de la guerra, Zelensky evocó a las tropas estadounidenses que lucharon contra los nazis durante la Segunda Guerra Mundial.
“La táctica de los rusos es primitiva. Se queman y destruyen todo lo que ven. Enviaron convictos a las líneas del frente, a la guerra. Lanzaron todo contra nosotros, similar a la otra tiranía, que en la Batalla de las Ardenas arrojó todo lo que tenía contra el mundo libre.
“Al igual que los valientes soldados estadounidenses que mantuvieron sus líneas y lucharon contra las fuerzas de Hitler durante la Navidad de 1944, los valientes soldados ucranianos están haciendo lo mismo con las fuerzas de [el presidente ruso Vladimir] Putin esta Navidad”, dijo. “Ucrania mantiene sus líneas y nunca se rendirá”.
Al concluir su discurso, Zelensky presentó al Congreso una bandera de batalla firmada por los defensores de Bakhmut, una ciudad de primera línea en el este de Ucrania que visitó en la víspera de su viaje a Washington.
El paquete de asistencia de seguridad anunciado por Washington el miércoles incluye un nuevo sistema de misiles Patriot, que se espera que ayude a Ucrania a proteger sus ciudades de misiles y drones que Rusia ha disparado contra instalaciones críticas.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia ha dicho que la entrega del avanzado sistema de misiles tierra-aire se considerará un paso provocativo.
Más temprano el miércoles, Putin dijo que creía que su país no tenía la culpa de la guerra en Ucrania, y agregó que ambos países estaban “compartiendo una tragedia”.
Su portavoz dijo que no se habían escuchado llamados a la paz durante la visita de Zelensky a Washington.
“Esto indica que Estados Unidos continúa su línea de lucha de facto e indirectamente con Rusia hasta el último ucraniano”, dijo Dmitry Peskov.
Desde que Rusia invadió Ucrania el 24 de febrero, el ejército estadounidense estima que al menos 100.000 soldados rusos y 100.000 ucranianos han muerto o han resultado heridos, junto con unas 40.000 muertes de civiles.
La ONU ha registrado 7,8 millones de personas como refugiados de Ucrania en toda Europa, incluida Rusia. Sin embargo, la cifra no incluye a aquellos que se han visto obligados a huir de sus hogares pero permanecen en Ucrania.
