Mudo Social – Noticias del Perú
Internacional

Hay que saber perder: Marcelo Ebrard abre la puerta a su salida de Morena por la victoria de Claudia Sheinbaum: “No nos vamos a someter a esa señora”

El excanciller toma distancia de la dirigencia del partido en una reunión privada con sus colaboradores, horas antes de conocerse los resultados: “No vamos a tolerar a una dirigencia que nos haga esto”

Marcelo Ebrard se dirige a los medios desde el hotel Bel Air en Ciudad de México, este 6 de septiembre.RAQUEL CUNHA (REUTERS)
GEORGINA ZEREGA

El enojo reinaba en el salón de juntas donde se reunió Marcelo Ebrard con su equipo la tarde de este miércoles. Primero dio una conferencia de prensa explosiva, donde pidió, horas antes de conocerse el resultado final, que se repitiera el proceso de las encuestas para elegir al candidato presidencial del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena). Luego mantuvo una reunión a puerta cerrada con sus colaboradores, en la que explicó los motivos de por qué ya no participaría en el proceso ni asistiría al evento donde se anunciará oficialmente al ganador de la interna. En el encuentro privado, al que tuvo acceso EL PAÍS, el excanciller abrió la puerta a su salida del partido, un escenario que confirmaron fuentes de su equipo a este periódico. “No nos vamos a someter a esa señora”, dijo sobre Claudia Sheinbaum, ante los aplausos de sus seguidores, que le gritaban “presidente, presidente”. Ebrard puso sobre la mesa además la ruptura con la dirigencia del partido, encabezada por Mario Delgado. “No vamos a tolerar a una dirigencia que nos haga esto”, sentenció.

El enojo del excanciller era latente. Durante la tarde del miércoles salió primero su equipo a denunciar irregularidades en las encuestas. No se trataba de incidencias de un solo día, sino de problemas registrados a lo largo de todo el proceso, aseguraron en conferencia de prensa. Más tarde salió él mismo a hablar. Acusó a la dirigencia de “impedir a la fuerza” el ingreso de su equipo al edificio donde se estaba llevando a cabo el conteo oficial de Morena y a la policía de golpear a su representante ante el partido, la senadora Malú Mícher. En la reunión privada, en la que no se permitió grabar ni tener teléfonos celulares prendidos, Ebrard lamentó lo sucedido, abrazó a Mícher, a la que reconoció el trabajo hecho, y dijo que no podía creer lo que estaba sucediendo. “Están diciendo que si voy a romper con Morena, pero yo no rompí nada, fueron ellos”, dijo claramente enojado. Con información de Zedryk Raziel.

La bronca mayor se la llevó Delgado, el presidente nacional de Morena. “Era colaborador mío, ¿se acuerdan?”, dijo el exsecretario de Exteriores de Andrés Manuel López Obrador. Delgado dio sus primeros pasos fuertes en el escenario político de la mano de Ebrard, en el Gobierno de Ciudad de México, entre 2006 y 2012, años en los que ocupó primero el cargo de titular de la Secretaría de Finanzas, y luego estuvo a cargo de la Secretaría de Educación capitalina.

Ebrard, de 63 años, explicó en la reunión privada, en la que también estuvo presente su esposa, Rosalinda Bueso, que no iba a aceptar premios de consolación si se los ofrecían, ni una senaduría ni ningún otro cargo. El excanciller dijo que iban a tener que explicar a la gente lo que había sucedido con estas encuestas, que hubiese sido más limpio el proceso si Delgado y la dirigencia del partido aceptaban los errores y fallos que se habían cometido en su realización, “y dejar de decir que está todo perfecto”. Por eso, Ebrard sostuvo que lo mejor era volver a ejecutar el proceso, ahora de manera más pulcra. El aspirante presidencial, que canceló su participación en el resto de la agenda de Morena de este miércoles, citó a su equipo a una junta para el próximo lunes para poder así definir el rumbo que tomarán sus aspiraciones a futuro.

Ebrard inició su carrera política, como muchos de sus compañeros de filas hoy, en el Partido Revolucionario Institucional (PRI) a inicios de los años ochenta. En los más de 40 años de trayectoria política, ha caminado de la mano de López Obrador gran parte de su carrera profesional. Fue miembro del Gabinete del actual presidente en el entonces Distrito Federal, donde ocupó la Secretaría de Desarrollo Social y Seguridad. Luego fue su sucesor en el Gobierno de Ciudad de México. Cuando López Obrador alcanzó finalmente la presidencia, Ebrard tomó posesión como secretario de Exteriores, donde le acompañó hasta hace unas semanas, cuando decidió participar de la interna presidencial.

No es la primera vez que Ebrard busca una candidatura presidencial, también lo quiso hacer por el Partido de la Revolución Democrática (PRD) —donde militaba con el actual presidente— en 2012, momento en el que declinó a favor de López Obrador, después de que las encuestas mostraran mayor intención de voto al actual presidente. Esa anécdota fue traída a discusión este miércoles, en la reunión privada. En ese caso, aceptar que había perdido fue lo correcto, dijo Ebrard. Sin embargo, explicó, en este caso ha sido diferente porque el proceso estuvo cargado de inconsistencias desde el inicio.

El excanciller no solo recorrió camino junto a López Obrador. En cuatro décadas de trayectoria, trabajó con Manuel Camacho Solís, a quien considera su mentor y quien estuvo a cargo de las negociaciones de paz entre el Gobierno de Carlos Salinas de Gortari y la insurgencia del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) que se había alzado en Chiapas en 1994. En 2007, cuando era jefe de Gobierno de Ciudad de México, impulsó la despenalización del aborto, una medida que le valió en aquel momento amenazas de excomulgación de la Iglesia católica.

Related posts

Qué le espera a Chile si en 90 días rechaza la segunda propuesta de Constitución

Maco

“Democracia no es Coca-Cola”: China afirma que las reglas establecidas en Occidente no pueden convertirse en normas “universales”

Maco

López Obrador responde a los ataques de Trump: “No permitiré que traten a México como piñata”

Maco

Leave a Comment