El fuego en California, que ha sido bautizado como “Dixie” por las autoridades locales, se declaró el pasado 14 de julio y los más de 5,500 efectivos que trabajan en él solo lo han podido contener un 32%.
El gigantesco incendio en el noreste de California (EE.UU.) superó las 99,000 hectáreas calcinadas y ya es el decimoprimero mayor jamás registrado en la historia del estado.
El fuego, que ha sido bautizado como “Dixie” por las autoridades, se declaró el pasado 14 de julio y los más de 5,500 efectivos que trabajan en él solo lo han podido contener en un 32%, informó el Departamento Forestal y de Protección contra Incendios de California (Cal Fire).
Aunque la investigación sobre la causa del incendio todavía sigue abierta, la principal hipótesis con la que se trabaja es la de un fallo en la red eléctrica.
PG&E (como se conoce popularmente a Pacific Gas & Electric) es la mayor empresa proveedora de electricidad en EE.UU. y suministra energía a prácticamente la totalidad de la población del centro y el norte de California.
El fuego trae los peores recuerdos a los vecinos de la cercana Paradise, una ciudad que fue arrasada en 2018 por el incendio más mortífero de la historia de California, en el que murieron 85 personas y que también se inició por un fallo en una línea de PG&E.
Fuera de California, en el vecino estado de Oregón, sigue activo el que actualmente es el mayor de todos los incendios de EE.UU., el conocido como “Bootleg”, que fue declarado tras la caída de un rayo el pasado 6 de julio en la zona boscosa de Winema-Fremont.
Las llamas ya han calcinado más de 167,000 hectáreas, pero los bomberos han logrado importante avances en las últimas jornadas y lo tienen contenido en un 74 %.