Sudáfrica sugiere utilizar a los militares de los países “amigos” del régimen israelí para enviar ayudas humanitarias al pueblo en la asediada Franja de Gaza.
En una conferencia de prensa con el canciller de Dinamarca, Lars Rasmussen, en la ciudad sudafricana de Johannesburgo, la ministra de Exteriores del país africano, Naledi Pandor, enfatizó la necesidad de realizar más esfuerzos para establecer un alto el fuego en la Franja de Gaza y facilitar el acceso de ayuda al pueblo indefenso.
Al respecto, recomendó enviar dichas ayudas a través de las fuerzas militares de los países “amigos” del régimen sionista de Israel, subrayando que estas fuerzas deben recibir órdenes de los jefes de sus países para ir a la frontera de Rafah y acompañar a los convoyes de ayuda a Gaza y Cisjordania.
“Estoy seguro de que se les permitirá pasar con seguridad y no puedo imaginar que los efectivos israelíes disparen contra estas fuerzas”, agregó.
Dirigiéndose a las autoridades de Estados Unidos y el Reino Unido, Pandor declaró que si envían sus tropas a Gaza para proteger los convoyes de ayuda, sería una iniciativa humanitaria que podría salvar vidas.
La titular sudafricana también advirtió de que ocurriría una “tragedia increíble” en Gaza si no se estableciera un alto el fuego.
Sudáfrica acudió el miércoles por segunda vez a la Corte Internacional de Justicia (CIJ), con sede en La Haya (Países Bajos), para pedir más medidas provisionales contra Israel en el marco de la denuncia presentada el pasado enero por genocidio contra los palestinos en Gaza.
Sudáfrica afirmó en su solicitud a la CIJ que esta podría ser “la última oportunidad que tendrá este Tribunal para salvar al pueblo palestino en Gaza que ya está muriendo de hambre y que ahora está ‘a un paso’ de la hambruna”, citando a la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) y sus diversas agencias han advertido repetidas veces que al menos 2,2 de los 2,4 millones de habitantes de Gaza están al borde de la hambruna, especialmente en el norte, donde las fuerzas israelíes bloquean la entrada de ayuda.
