Irán ejecutó el sábado a dos hombres por un atentado contra un santuario chií en octubre en el que murieron al menos 13 personas que fue reivindicado por el grupo militante Estado Islámico, informó la prensa estatal.
Los hombres fueron ahorcados al amanecer en la ciudad meridional de Shiraz, informó la agencia oficial de noticias IRNA.
Según los medios de comunicación locales, durante el juicio los hombres declararon que habían estado en contacto con el Estado Islámico en Afganistán y que habían ayudado a organizar el atentado contra el santuario de Shah Cheragh en Shiraz.
Imágenes de circuito cerrado de televisión difundidas por la televisión estatal mostraron a un atacante entrando en el popular santuario tras esconder un fusil de asalto en una bolsa y disparar mientras los fieles intentaban huir y esconderse en los pasillos.
El hombre, identificado como ciudadano de Tayikistán, murió más tarde en un hospital a causa de las heridas sufridas durante el ataque. En un primer momento, las autoridades afirmaron que el atentado había causado 15 muertos, pero posteriormente revisaron la cifra y la redujeron a 13.
El Estado Islámico, que en su día supuso una amenaza para la seguridad en todo Oriente Medio, ha reivindicado actos de violencia anteriores en Irán, incluidos dos atentados mortales en 2017 contra el Parlamento y la tumba del fundador de la República Islámica, el ayatolá Ruhollah Jomeini.
