En una reunión celebrada el sábado con la participación de los miembros del comité especial formado por el presidente Ebrahim Raisi para investigar los disturbios de 2022, el canciller de Irán, Hosein Amir Abdolahian, describió esta iniciativa como una clara señal de la “responsabilidad y seriedad” de Teherán en la protección y promoción de los derechos humanos.

Refiriéndose al actual genocidio de Israel en Gaza y la grave violación de los derechos de los palestinos durante las últimas ocho décadas, que cuentan con el apoyo de EE.UU. y los países occidentales, Amir Abdolahian dijo que todas las afirmaciones de Occidente contra Irán en relación con los DD.HH. en la República Islámica “carecen de toda validez legal y moral”.

En este contexto, instó a poner fin al “uso instrumental del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (CDHNU) por parte de ciertos países occidentales”.

Al desarrollar su postura, aseveró que los mecanismos impuestos por las instituciones de derechos humanos a la República Islámica, bajo la influencia y presión de unos pocos Estados occidentales, no tienen justificación legal ni legitimidad.

Irán: EEUU y Europa no tienen moral para hablar de derechos humanos

Irán critica declaraciones injerencistas de Occidente en sus asuntos, asegurando que EE.UU. y Europa carecen de autoridad legal y moral para hablar de DD.HH

El año pasado, Irán era escena de disturbios acaecidos en todo el país bajo la excusa de la muerte de la joven iraní Mahsa Amini —quien falleció el 16 de septiembre en un hospital en Teherán días después de ser detenida por la Policía—.

Desde el inicio de los actos vandálicos, las autoridades iraníes veían las huellas de Estados Unidos, Israel y varios Estados europeos en estos disturbios y aseguraron que actuarían con firmeza ante los que vulneran la seguridad de Irán.