La incertidumbre sobre un posible ataque a gran escala de Irán y sus aliados mantiene a Israel en la zozobra desde hace una semana, mientras se intensifica el intercambio de fuego entre las fuerzas israelíes y el grupo chií libanés Hizbulá, pese a que la comunidad internacional se esfuerza por evitar una escalada en Oriente Medio. Al mismo tiempo, el líder de Hizbulá, Hassan Nasrallah, ha advertido a Israel que se prepare para “cualquier escenario”.
“Irán ha dejado claro que quiere atacar más que objetivos militares”, dijo en conferencia de prensa David Mencer, portavoz del Gobierno israelí, al advertir de que la república islámica “perderá más de lo que gana” si lo hace. “A estas alturas ya no queda ni sombra de duda de que Irán y sus aliados del ‘eje del mal’ han formado un cerco contra Israel, pero queda igualmente claro que Israel cobrará un alto precio por ataques en su contra”, aseveró. Por su parte, el líder de Hizbulá, Hasan Nasrala, confirmó que su milicia “va a responder” y que lo mismo harán Irán y Yemen.
Hace justo una semana, el Ejército israelí realizó un ataque en las afueras de Beirut que mató al máximo líder militar de Hizbulá, Fuad Shukr. Más tarde un ataque en Teherán -que las autoridades iraníes atribuyen a Israel- resultó en la muerte del líder político del grupo islamista Hamás, Ismail Haniyeh.
Desde entonces, Irán y sus aliados del llamado ‘Eje de Resistencia’ -Hamás en la Franja de Gaza, la Yihad Islámica en Cisjordania ocupada, Hizbulá en Líbano, los rebeldes hutíes en Yemen, la Resistencia Islámica en Irak y otras milicias en Siria- juraron vengarse. Este martes, Nasrala avisó de que la represalia contra Israel puede ser individual o en conjunto.
El jefe de la Dirección de Inteligencia del Ejército israelí, Aharon Haliva, visitó dos bases este martes para hablar con comandantes y soldados, haciendo hincapié en la cuestión de Irán y Hizbulá. “Deben continuar haciendo todos los esfuerzos posibles para proporcionar inteligencia de alta calidad”, dijo.
Algunos de los aliados más estrechos de Israel, que se preparan para ayudarle a repeler el posible ataque iraní, están presionando a las autoridades israelíes para limitar su respuesta a la anunciada agresión, según la cadena pública de noticias israelí, Kan.
Los aliados, liderados por Estados Unidos, han recordado a Israel que el objetivo es evitar una guerra regional, por lo que debe ser comedido en su respuesta. Pero la diplomacia de Israel está alertando a la esfera internacional sobre su legitimidad para responder a los posibles ataques de Irán y Hizbulá, según el Canal 12 israelí.