Israel continúa inmerso en la ofensiva contra el Líbano que inició el pasado 1 de octubre. Este sábado, el Ejército israelí ha confirmado haber destruido el que sería el mayor centro de mando de Hezbolá, situado en el sur del país y desde donde, según el Ejército castrense, se vigilaban varias ciudades israelíes situadas junto a la frontera de ambos países. Una destrucción que se ha convertido, así, en el mayor ataque perpetrado en el sur del país desde que se recrudeció el conflicto.
Tal y como han detallado las fuerzas de defensas israelíes, han sido tropas de la 98 División las que han asaltado este centro de mando de la milicia chií, allanando tanto un cuartel general del grupo como un puesto de observación. El centro, además, contaba con un gran número de dispositivos explosivos, armas y material de inteligencia.
De igual manera, las FDI han informado de la destrucción de un túnel perteneciente a la fuerza militar Radwan de Hezbolá situado al sur del Líbano. Tal y como han descrito desde Israel, las instalaciones suponían otro de los lugares clave de la organización e incluían un centro de comando, un depósito de armas, habitaciones donde residían, motos y otros equipos.
Pero estas no han sido las únicas incursiones de las tropas israelíes durante este sábado. La aviación israelí, asimismo, ha vuelto a atacar los suburbios de Beirut, la capital del Líbano, un ataque que, aunque no ha sido confirmado por las propias fuerzas israelíes, sí ha sido confirmado por la Agencia Nacional de Noticias libanesa en un comunicado: “La aviación enemiga (en referencia a Israel) ha lanzado una violenta incursión, la segunda sobre el suburbio sur, y se elevan columnas de humo”. Se desconocen por el momento si se han producido víctimas.
Mientras Israel confirma o desmiente este ataque, y unos días después de la muerte del líder de Hamás, Yahya Sinwar, el Ejército israelí ha continuado en su lucha por acabar también con los altos mandos de Hezbolá. Así, el Ejército ha confirmado la muerte este sábado de otro comandante, Naser Abed al Aziz Rahid, líder del grupo chií en Bint Jbeil, en el sur del Líbano.
“Había promovido y llevado a cabo actividades terroristas contra civiles israelíes desde la zona de Bint Jbeil”, expresa el comunicado que ha sido emitido por las fuerzas castrenses. Por otro lado, Israel ha confirmado la llegada de 180 proyectiles que habrían sido lanzados desde el Líbano este sábado. Casi todos ellos han sido interceptados pero su llegada a territorio israelí ha provocado la muerte de un hombre de 50 años en la ciudad de Acre, así como una decena de heridos en Haifa y Galilea Occidental.
Ante este escenario, el grupo libanés ha reivindicado algunos de estos lanzamientos “en apoyo a nuestro firme pueblo palestino en la Franja de Gaza y respaldando su valiente y honorable Resistencia y en defensa del Líbano y su pueblo” han destacado en un comunicado.
Precisamente otro de los ataques perpetrados este sábado por las fuerzas del Líbano ha sido contra la residencia del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en la localidad de Cesarea. Pese a ello, ni él ni su mujer se encontraban en la vivienda en el momento de los hechos, por lo que no ha habido que lamentar ninguna víctima, según ha expresado la propia oficinal del mandatario.
El ataque, ejecutado por un avión no tripulado, ha acabado impactando en el barrio costero de la ciudad tal y como ha expresado la Policía israelí, que no ha precisado más detalles de lo ocurrido. Además, también se han disparado otros dos proyectiles contra la misma zona que han acabado siendo interceptados por las fuerzas israelíes.
