Argentina continúa en la mira internacional. El viernes 1 de marzo, el presidente Javier Milei brindó su primer discurso en el Congreso. En medio de la tensión entre el Ejecutivo y el Legislativo, el mandatario de ultraderecha emitió su mensaje por más de una hora para analizar la situación económica y política a más de 80 días en el poder, así como el anuncio de las nuevas medidas “anticastas” y una invitación a los
Entre aplausos y cantos a favor de Milei, el presidente leyó sus ideas y propuestas, pidió la unión entre los grupos y dejó atrás las diferencias. Le dijo a la prensa que estará atento a la respuesta de los gobernadores. A comparación de lo que solemos ver en las declaraciones del economista, esta vez se presentó con una actitud conciliadora y menos retadora. No obstante, todo sería parte de una estrategia, como lo explicaron el abogado y analista político Jeffrey Radzinsky y el internacionalista Alonso Cárdenas en una entrevista para La República.
“Siempre hay una lógica estratégica en los políticos”
Tanto los congresistas como el mismo presidente Javier Milei se mostraron serenos y conciliadores durante el encuentro, pues se dudaba que esto sea así, ya que siempre hubo discrepancias. Incluso, el mandatario los llamó “nido de ratas”, “traidores” y que no los necesitaba “para salvar la economía” en una reciente entrevista para el medio británico Financial Times, publicada el jueves 29 de febrero, un día antes de la apertura de sesión ordinaria en el Congreso.
Frente a esto, el analista Jeffrey Radzinsky afirmó que “siempre hay una lógica estratégica en los políticos y más con este tipo de mensajes tuvo un rating bastante alto si uno lo compara con otros mensajes presidenciales en Argentina. Había una expectativa y una audiencia grande esperando el mensaje”. En la lectura del discurso se pudo ver cómo Milei recibió “el apoyo de los aliados del gobierno, básicamente el macrismo y la Libertad Avanza, y un pedazo de la Unión Cívica Radical”, señaló Alonso Cárdenas a LR+.
Por otro lado, el abogado aclaró que “no se pueden concretar (las medidas de Milei) si es que no hay acuerdos políticos en el Parlamento”. El internacionalista Cárdenas coincidió con ese punto y sostuvo que “a diferencia del Perú, en los partidos políticos argentinos están mucho más cuajados, entonces hay algunos puntos de la agenda que propone Javier Milei que no van a ser aceptados por las agrupaciones políticas”.
“Hay que diferenciar la forma del fondo del discurso de Milei”
Jeffrey Radzinsky define a Javier Milei como un buen comunicador, más allá de su estilo retador; sin embargo, “ayer no lo mostró”, pues no hubo “contacto visual”, sino más lectura. Pese a ello, lo hizo bien, según el analista, quien agrega que el mayor reto de Milei es “mostrar resultados, porque la expectativa también genera impaciencia de logros concretos. Eso pasó con el pacto, que presenta a inicios de marzo, apuntando a mayo, porque le da un tiempo para negociar, para avanzar y eventualmente me imagino en el entorno del mostrar algún resultado que todavía no ha podido mostrar”, detalló.
Alonso Cárdenas compartió el punto de vista del analista político, pues actualmente el economista Milei “necesita sí o sí la aprobación del Congreso. Entonces, lo más probable es que primero busque consolidar las alianzas y luego a ver cómo podría negociar con la bancada opositora”, añadió en la entrevista.
Asimismo, el internacionalista señaló que “el discurso de Javier Milei se va acercando a lo que se esperaría de un mandatario argentino: más centrado, mucho más moderado, inclusive, educados, pero esa es la forma. Lo que nos debe interesar también es el fondo” y está claro que el economista de ultraderecha “va a seguir con esta propuesta de dinamitar las instituciones en Argentina y una ola muy agresiva de desmantelar lo que queda del Estado argentino. Entonces ahí tenemos que diferenciar entre la forma, que es más educada, del fondo, que prácticamente se mantienen las mismas ideas”, aclaró.
Pacto del 25 de Mayo
El anuncio de este pacto o “nuevo contrato social”, como lo denominó Javier Milei, puede ser favorable y al mismo tiempo lo contrario. Tal y como expuso el mandatario argentino cuando habló del Pacto del 25 de Mayo, existen 10 políticas de Estado:
Inviolabilidad de la propiedad privada
El equilibrio fiscal innegociable
Reducción del gasto público en torno al 25% del PBI
Reforma tributaria
Rediscutir la coparticipación de impuestos
Compromiso provincial en explotar recursos naturales
Reforma laboral que promueva el trabajo formal
Reforma previsional sustentable y con posibilidad privada
Reforma política
Apertura del comercio internacional.
Pacto del 25 de Mayo. Foto: @OPRArgentina
Para Radzinsky, el tiempo puede ser una ventaja, ya que implica tiempo para las alianzas con los opositores, principalmente. “El punto fuerte aquí ya no está en los mensajes simbólicos o criticar la burocracia, sino en mostrar resultados”, señaló. Mientras que Cárdenas precisó la desventaja de ello. “El 25 de mayo es una fecha muy lejana y la situación social, económica y política de Argentina se está degradando de una manera muy acelerada, la pobreza se ha disparado, hay hambre, no hay empleo, los sueldos no alcanzan, y pues lo que se requiere son medidas urgentes”, dijo a LR+.
Las medidas “anticastas” de Milei
El mandatario de ultraderecha, Javier Milei, anunció este viernes 1 de marzo una lista de medidas “anticastas” en su discurso:
Eliminación de jubilaciones de privilegio para presidente y vicepresidente.
Se obligará a los sindicatos a solo tener una reelección.
Los convenios de las empresas se impondrán por sobre los del sector.
Las personas que sean condenadas en segunda instancia por corrupción no podrán presentarse a elecciones.
Reducir los contratos de asesores en el Congreso.
Se eliminará el financiamiento público a los partidos políticos.
Para Jeffrey Radzinsky, “son efectivos, políticamente hablando, porque son consecuentes con su discurso de campaña de ir contra los privilegios de ciertos grupos que históricamente se han beneficiado”, dijo a LR+. No obstante, no los consideró “sustanciales” para los ciudadanos, ya que a ellos les preocupa más la inflación, sus pensiones, sueldos, salud pública, etc.
Por su parte, Alonso Cárdenas estuvo de acuerdo y consideró a estas medidas más “de una campaña presidencial, pero no de un gobierno. Se han traducido como medidas antipersonas o anticiudadano común, quienes ahora tienen muchas más dificultades para poder alimentarse, para que el sueldo alcance, la seguridad ciudadana, la calidad de los servicios públicos, entre otras preocupaciones en el país”.
Fuente: La República