El Nobel hispanoperuano, que ocupará el sillón 18, es el primero en acceder a la institución sin haber escrito en lengua francesa, a cuya defensa y preservación se dedica el organismo
El escritor hispanoperuano y premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa entra hoy en la Academia francesa, donde ocupará el sillón 18. Se trata de uno de los acontecimientos más relevantes de la vida cultural del país y también de la propia historia de la institución, fundada por Richelieu en 1635: nunca antes se había permitido el ingreso a alguien que no ha publicado ni un libro en la lengua francesa, cuya defensa y preservación es la razón de ser del organismo. Entre los asistentes al acto, figura el rey emérito de España, Juan Carlos I, invitado personalmente por el propio escritor.
Vargas Llosa se convertirá así en inmortal, como se conoce a los 40 miembros del cónclave encargado de “defender la lengua francesa” y preservar su “inmortalidad”. La candidatura, como explicaba en noviembre de 2021 el propio novelista, surgió de una conversación en París con su amigo, el escritor y académico Daniel Rondeau. “Nos tomamos un café. Y estaba con otro académico con nosotros”, recordó. “Y de pronto me dijeron que la Academia francesa me esperaba. Y ahí armaron prácticamente una emboscada de la cual he resultado académico francés”.
El secretario perpetuo de la institución, Hélène Carrère d’Encausse, de 93 años, defendía esta semana la elección del autor de La ciudad y los perros, La fiesta del chivo o Conversación de La Catedral, pese a que nunca haya escrito en francés: “No conozco a nadie que hable tan bien de Flaubert como él. Ha ayudado a la cultura francesa más que muchos escritores franceses”.