El fallo dictamina que solo el equipo del opositor Juan Guaidó puede manejar las reservas, pero hasta ahora no ha autorizado su disposición
Un tribunal comercial de la Alta Corte de Londres ha reiterado este viernes la decisión sobre la administración de más de 1.000 millones de dólares en reservas de oro del Banco Central de Venezuela que están bajo custodia del Banco de Inglaterra. La resolución supone un nuevo revés al Gobierno de Nicolás Maduro en este caso, porque la corte ha señalado que las únicas autoridades legítimas para manejar los fondos son las que ha nombrado el dirigente opositor Juan Guaidó. En 2019 el dirigente opositor fue reconocido por decenas de países como presidente interino de Venezuela en respuesta al desconocimiento de las elecciones del 20 de mayo de 2018 en las que Maduro se reeligió sin participación de adversarios.
Las 31 toneladas de oro resguardado en las bóvedas del Banco de Inglaterra y otros activos de Venezuela en el extranjero han estado en el centro de la disputa entre el Gobierno de Maduro y la oposición como consecuencia del laberinto institucional en el que está sumergido el país sudamericano. En ese laberinto se encontraron dos juntas directivas del mismo Banco Central de Venezuela, una designada por el Gobierno y otra por la oposición agrupada en la figura de Guaidó, que se disputan el control de las reservas.
El Supremo venezolano, controlado por el chavismo, ha invalidado las acciones de Guaidó y la junta directiva designada por él. Este es el argumento que usó la defensa del Gobierno de Maduro para intentar desbloquear el acceso a los fondos para supuestamente invertirlos en la atención de la población durante la pandemia de covid-19 y en las mejoras del sistema de salud. Sobre ese recurso ha decidido la jueza británica Sara Cockerill este viernes, cuando señaló que había “evidencia clara” de que el Tribunal Supremo de Justicia estaba formado por jueces que apoyaban a Maduro y que sus decisiones no eran reconocidas bajo la ley británica.
En un juicio anterior por este mismo caso la Corte Suprema de Inglaterra discutió sobre quién era el presidente legítimo de Venezuela para lo que hizo consultas a la Cancillería británica, que dio su respaldo a Guaidó. La decisión sobre cuál de las juntas tiene autoridad y acceso a las reservas se conocerá en octubre. En el camino, el cambio de primer ministro tras la dimisión de Boris Johnson podría modificar el tablero de un caso que es más político que jurídico. Si cambia la posición de Inglaterra sobre el reconocimiento sobre el Gobierno de Venezuela podría comenzar un nuevo juicio sobre el oro. Guaidó ha logrado mantener el respaldo de Estados Unidos, Reino Unido y otros países. Sin embargo, la Unión Europea sí rebajó a principios de 2021 su calificación tras vencerse su período extendido como jefe del Parlamento.
La oposición ha asumido el nuevo dictamen como una “victoria internacional para la democracia y la libertad”. “Esta decisión representa un paso más en el proceso de protección de las reservas internacionales de oro de Venezuela y su preservación para el pueblo venezolano y su futuro”, expresó Guaidó tras conocerse el fallo. Pese al reconocimiento que le dan Inglaterra y sus tribunales al líder opositor hasta ahora no se ha autorizado la disposición de los fondos por su parte de su equipo.
La representación legal del Gobierno de Maduro ha señalado que continuará con sus esfuerzos para acceder a las reservas. “Este es un fallo desafortunado que se basa en un complejo asunto legal sobre el reconocimiento de jueces extranjeros”, dijo Sarosh Zaiwalla, que representa al Banco Central de Venezuela de Maduro. “El BVC está considerando una apelación”, añadió.
Este no es el único pleito por el oro venezolano en tribunales británicos. En 2020 el Deutsche Bank pidió a la justicia decidir quién es el legítimo administrador de 123 millones de dólares que pertenecen al BCV, producto de la finalización de un acuerdo de swaps de oro entre la institución venezolana y el banco alemán. La sentencia de la jueza Cockerill será un precedente para también resolver este litigio.
Fuente: El País