Pese a que geográficamente están separados por miles de kilómetros, Bolivia e Irán dieron un paso más en su acercamiento.
Los gobiernos de ambos países firmaron este jueves un memorándum de entendimiento para ampliar la cooperación bilateral en el campo de seguridad y de defensa, informó la agencia estatal persa IRNA.
El acuerdo fue rubricado en Teherán por el ministro de Defensa boliviano, Edmundo Novillo Aguilar, y su par iraní, y Mohammad Reza Ashtiani.
El documento ha sido criticado por miembros de la oposición boliviana, que han lamentado que el gobierno de Luis Arce prosiga el acercamiento con Irán iniciado en el mandato del expresidente Evo Morales.
El nuevo acuerdo de seguridad no ha sido detallado y las partes apenas han informado que el mismo está dirigido a ayudar a Bolivia en su lucha contra el narcotráfico y a reforzar la vigilancia de sus fronteras.
Sin embargo, el ministro iraní admitió que el pacto incluye la venta de material y el entrenamiento de personal.
“A la luz de las necesidades críticas de Bolivia en materia de defensa de fronteras y de lucha contra el narcotráfico, estableceremos activamente colaboraciones en equipos y conocimientos especializados con ese país”, declaró Ashtiani.
Desde el Instituto de Estudios para la Guerra (ISW, por sus siglas en inglés) dieron por hecho que el gobierno de Teherán ofrecerá sus drones a las autoridades de La Paz.
En un reporte, la organización especializada en temas militares justificó sus sospechas en el hecho de que el ministro iraní aseguró, antes de la firma del acuerdo, que la industria militar de su país estaba lista para ofrecer “tecnología avanzada” a Bolivia.
Asimismo, el ISW también recordó que los aviones no tripulados persas se vienen siendo utilizando en muchos países para labores de vigilancia fronteriza. En 2022, un alto cargo iraní aseguró que 22 países ya operaban sus drones, entre los cuales se encuentra Venezuela.