El sistema antiaéreo estadounidense NASAMS.
EE.UU. suministrará a Ucrania sistemas de misiles antiaéreos de corto a medio alcance NASAMS por un valor de $182 millones, en medio del conflicto con Rusia.
El fabricante de armas estadounidense Raytheon firmó un contrato con el Departamento de Defensa de Estados Unidos (el Pentágono) para proveer al país eslavo los Sistemas de Misiles Superficie-Aire Avanzado Noruego (NASAMS, por sus siglas en inglés), según una lista de pedidos militares publicada el viernes en la página web del Pentágono.
“Raytheon Co. recibió un contrato de precio fijo de 182 295 333 dólares para la adquisición de NASAMS. […] La fabricación se realizará en Tewksbury, Massachusetts, con una fecha de finalización estimada en el 23 de agosto de 2024”, reza la nota.
El NASAMS es un sistema de defensa antiaérea terrestre de corto a medio alcance, capaz de destruir vehículos aéreos de combate no tripulados (drones), helicópteros, misiles de crucero y aviones.
El contrato recién firmado forma parte de un paquete adicional de ayuda militar estadounidense a Ucrania por un valor aproximado de 3000 millones de dólares, el mayor que ha otorgado Washington a Kiev hasta ahora, anunciado el miércoles por la Casa Blanca.
El monto se utilizará, según Washington, para la adquisición de drones, armas y otros equipos militares a utilizarse recién en uno o dos años, y en el entrenamiento y equipamiento de las fuerzas ucranianas.
El nuevo paquete de ayuda militar estadounidense a Kiev fue anunciado cuando ya cumplen seis meses desde el inicio de la operación especial rusa en Ucrania, el 24 de febrero.
Desde el inicio del conflicto, EE.UU. ha proporcionado varios lotes de ayudas militares a Ucrania, pese a advertencias de Moscú sobre el suministro de armas a Kiev, que, a su juicio, son no solo un movimiento peligroso, sino acciones que convierten los convoyes pertinentes en objetivos legítimos.
Moscú además asevera que Occidente está poniendo en riesgo su propia seguridad al entregar ingentes suministros de armas a Ucrania, y advierte de que de esta forma los países occidentales están echando leña al fuego del conflicto, lo que tendrá repercusiones trágicas.
