Daniel Noboa fue elegido presidente de Ecuador en agosto de 2023. Por sorpresa, no aparecía entre los principales candidatos a la victoria, ganó las elecciones presidenciales extraordinarias. Se impuso en la segunda vuelta a Luisa González, la candidata presidencial del “correísmo”. Pero Noboa fue elegido para un mandato de sólo año y medio.
Sin embargo, el presidente ecuatoriano quiere aprovechar el tiempo. Está convencido de que la cuestión de la seguridad es la que le puede permitir seguir en el poder en un hipotético segundo mandato. De modo que, con el presidente de El Salvador Nayib Bukele como modelo, Noboa convocó en febrero una consulta popular relacionada con la seguridad ciudadana. Los ecuatorianos votan este domingo.
Se trata de que digan si están de acuerdo con permitir controles permanentes de las fuerzas armadas, endurecer las penas en delitos de narcotráfico o permitir la extradición de ecuatorianos, una propuesta que ya fue rechazada hace un año. Están llamados a votar 13.654.291 de ciudadanos, según datos del Consejo Nacional Electoral (CNE).
Los principales afectados por los referendos de este domingo son los presos condenados. El Gobierno pretende que cumplan íntegramente su pena en prisión y, además, eliminar parte de los beneficios penitenciarios.
La consulta tendrá once preguntas o pregunta por once diferentes cuestiones y sólo una de ellas es a propuesta de la Asamblea Nacional. Noboa ha necesitado la aprobación previa de la Corte Constitucional. Además de sobre seguridad se abordan temas como justicia, inversiones y empleo.
De las once propuestas, cinco abordan posibles reformas de la Constitución, que fue aprobada en 2088 durante el mandato de Rafael Correa (2007-2017). Las otras seis preguntas están relacionadas con cambios legislativos que no suponen modificaciones a la carta magna.