Según el informe , publicado por el Consejo de Relaciones Estadounidenses-Islámicas (CAIR, por sus siglas en ingles), los niños musulmanes en Estados Unidos han informado un asombroso aumento del 63 % casos de odio antimusulmán en las escuelas en 2022, aunque las quejas de sentimientos y actos de odio parecen mostrar una disminución general de 23%.
“El acoso escolar y el uso de material islamófobo en las aulas es alarmante. Si bien nos complace ver una disminución en los incidentes liderados por el Gobierno, los niños se han convertido en los principales objetivos del odio islamófobo”, denunció el director de investigación y defensa de CAIR, Corey Saylor.
En este marco, recordó un vídeo viral publicado en redes sociales, donde un maestro de una escuela en el estado de Florida faltó el respeto a los estudiantes musulmanes mientras rezaban en su oficina, con previa autorización.
Además de la educación, la tendencia al alza en las actitudes anti-musulmanas continúa en áreas como la banca, con cuentas que se abren y cierran en base a creencias religiosas, lo que hace que las transacciones financieras sean un gran desafío para los musulmanes, denunció Saylor.
Se aludió a una encuesta realizada en marzo por el Institute for Social Policy and Understanding encontró que las instituciones financieras representan desafíos para el 27 % de los musulmanes en Estados Unidos. Saylor señaló que hubo un aumento del 32% en las denuncias de acciones antimusulmanas contra funcionarios gubernamentales y encargados de hacer cumplir la ley durante el primer año de la Administración del expresidente Donald Trump.
Dijo que cree que la disminución de estas quejas en 2022 podría estar relacionada con el nuevo período con el presidente Joe Biden. La discriminación hacia los musulmanes ha aumentado significativamente en los últimos años en Estados Unidos. Según musulmanes del país, los estadounidenses no participarían en conversaciones normales con musulmanes locales por desconfianza o no donarían a organizaciones benéficas islámicas por temor a que el gobierno considere que las organizaciones son sospechosas o problemáticas.
A tal punto llega la islamofobia en EE.UU. que en muchos centros musulmanes del país se ha optado por la utilización de servicios de seguridad o policía local. No obstante, hay esperanza, para algunos. El crecimiento del Islam entre los segmentos demográficos del país significa también un incremento en la participación política.
