El presidente chino, Xi Jinping (dcha.), recibe a su homólogo palestino, Mahmud Abás, en Pekín, 14 de junio de 2023.
El canciller palestino censura el silencio de EE.UU. ante las agresiones de Israel a palestinos y dice que Ramalá opta por estrechar su alianza con China.
Riad al-Maliki ha criticado, este jueves durante una rueda de prensa con medios extranjeros, la falta de voluntad del actual Gobierno de Estados Unidos, presidido por Joe Biden, para resolver el conflicto palestino-israelí. La Administración de Biden ha sido una decepción, ha dicho.
“Han pasado tres años desde las promesas del presidente Biden, pero no hemos visto nada más que apoyo financiero a la Agencia de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina [UNRWA] y los hospitales en” Al-Quds (Jerusalén), ha criticado.
Al-Maliki ha expresado la frustración de los palestinos con la posición de EE.UU. sobre las hostilidades y crímenes de Israel, incluidos sus recientes ataques brutales en la ciudad de Yenín, en el norte de Cisjordania, que dejaron una docena de muertos y más de 140 heridos.
Ante tal circunstancia, el jefe de la Diplomacia palestino ha dicho que Palestina ha optado por afianzar lazos con Pekín, y “se está volviendo más hacia China, que apoya su plena membresía en las Naciones Unidas”.
“China no solo busca aumentar su presencia económica sino también su presencia política en Asia Occidental. Muchos países del mundo quieren el apoyo de China, ya que ésta se ha convertido en un actor global importante”, ha detallado.
Palestina rechaza mediación de EEUU y aboga por el rol de China
“No hay un proceso de paz en Asia Occidental. Si hay uno en el futuro, ¿por qué China no debería participar junto con otros países?”, ha preguntado, lamentando que Washington no haya dado paso alguno para reanudar las negociaciones palestino-israelíes, estancadas desde 2014 debido, entre otros, a la continuación de la expansión de las colonias ilegales por parte de Israel en Cisjordania y Al-Quds.
Los palestinos acusan a Estados Unidos de ponerse del lado de Israel y de ser parcial en el estancado proceso de paz. Además, creen que Washington con su silencio ante las violaciones israelíes da un cheque en blanco al régimen de ocupación para continuar la matanza, expansionismo, y agresiones contra palestinos.
Un alto dirigente del movimiento palestino HAMAS manifiesta que Washington ya no es la policía internacional y no puede imponer su voluntad a otras naciones.
China, al contrario de EE.UU., ha apoyado una y otra vez con firmeza la justa causa del pueblo palestino y respaldado el derecho de esta nación a tener un Estado independiente.
Pekín y Ramalá acordaron en junio elevar el nivel de sus relaciones diplomáticas a la categoría de “asociación estratégica”, durante una reunión entre sus presidentes, Xi Jinping y Mahmud Abás, en Pekín, lo que no le gustó a Washington.
El acercamiento de China a los países de Asia Occidental y el papel clave que está jugando cada vez más el gigante asiático en los procesos de paz en la zona han saltado las alarmas en EE.UU.