El informe sobre los asuntos en Hong Kong publicado por el Gobierno británico, donde Pekín es acusado de violar derechos y libertades de residentes de la ciudad en la primera mitad del 2022, representa una interferencia en los asuntos internos de China, afirmó este viernes el vocero del Ministerio de Exteriores, Wang Wenbin.
El informe “interfiere gravemente en los asuntos de Hong Kong, que son asuntos internos de China, y viola seriamente el derecho internacional y las normas básicas que guían las relaciones internacionales”, manifestó Wang, agregando que “China lo rechaza firmemente”.
Además, destacó que, desde la devolución de Hong Kong a China en 1997, la ciudad goza de un “alto grado de autonomía”. “Residentes de Hong Kong gozan de muchos más derechos y libertades en consonancia con la ley que antes de 1997. Cualquier persona imparcial estaría de acuerdo en que la ley de seguridad nacional y el sistema electoral mejorado de Hong Kong le han permitido entrar en una nueva etapa”, en la que la Región Administrativa Especial “ha restaurado el orden y está dispuesta para prosperar”, señaló. Añadió que inversores internacionales también “comparten la opinión de que el ambiente de negocios en Hong Kong es ahora más seguro, estable y predecible”.
“El Reino Unido no tiene soberanía, ni jurisdicción, ni derecho de supervisión de Hong Kong después de su devolución a China”, subrayó Wang, agregando que Londres intenta denigrar a las autoridades de la ciudad y socavar el imperio de la ley mediante el apoyo a “elementos antichinos ilegales que tratan de sembrar caos”. “Instamos al Reino Unido a comprender la tendencia histórica, despertar de su sueño colonial, respetar la soberanía de China y dejar de interferir en asuntos de Hong Kong, que son asuntos internos de China, porque de lo contrario terminará disparándose en el pie”, concluyó el vocero.