¿Nos debe interesar lo que pasa en Ucrania y Rusia?
Sí. La invasión que ha ordenado el presidente de Rusia, Vladimir Putin, contra Ucrania, en contra de la voluntad de miles de ciudadanos y ciudadanas de Rusia, también es asunto nuestro, por varios motivos:
1 Hay ucranianos y ucranianas que son vecinos o vecinas. La migración de Ucrania también ha llegado a Perú y una actitud esperable, especialmente si sabemos que es bueno tratar a los otros cómo esperamos que nos traten, es manifestarles nuestras con-dolencias. El conocimiento de hechos dolorosos que padecen seres queridos, provoca ansiedad e impotencia agravada por la lejanía, así que unas palabras amables siempre ayudan. Lo mismo aplica para las residentes de Rusia, cuyo pueblo ha sido arrastrado a una guerra por un líder incapaz de liderar un desarrollo pacífico para con sus vecinos. Igualmente, hay peruanos y peruanas en Ucrania y bien hace el gobierno peruano en ayudar a evacuarlos de allí.
2 Como Rusia es un importante productor de gas y de petróleo, el corte de su distribución por las sanciones que la Unión Europea y Estados Unidos le están imponiendo, está llevando a un aumento de sus precios internacionales, y como Perú sigue siendo un importador de petróleo, ese aumento de precios se trasladará a todos los productos. También el precio del trigo habría de subir, dado que Ucrania es un importante productor de este cereal. Espero que esta vez nadie caiga en el engaño de atribuir al gobierno peruano la responsabilidad por precios internacionales.
3 La guerra actual es un conflicto armado, y como todo conflicto, un proceso complejo, con muchos actores, que no se puede reducir a una falsa dicotomía entre buenos y malos. En Ucrania confluyen, entre otros, intereses de los pueblos ucranianos y los del Este han venido siendo bombardeados por su propio gobierno desde hace años; del gobierno ruso, también en contra de parte importante de su propio pueblo, que se encuentra protestando en las calles contra la guerra; de la OTAN, liderada por Estados Unidos, que ha mantenido una doctrina donde Rusia es su enemigo, colocando instalaciones militares cada vez más cerca de las ciudades rusas. También como en todo conflicto, la única forma de resolverlo es atendiendo a los intereses de todas las partes involucradas.
4 El carácter armado de este conflicto es lo que lleva a que todos los pueblos involucrados, en Ucrania, Rusia y los países vecinos, queden como perdedores. Incluso pierden pueblos lejanos, como el nuestro, por la razón económica ya indicada. Los únicos claramente ganadores son los productores de gas y petróleo en países no sancionados por Estados Unidos y sus aliados (incluso el mismo Estados Unidos). En consecuencia, corresponde rechazar esta guerra y exigir un alto al fuego inmediato, el retiro de las tropas invasoras, la suspensión de las sanciones económicas y un acuerdo que incluya el principio de libre autodeterminación de los pueblos como base del Derecho Internacional que sostenga una paz duradera.
Asimismo, corresponde usar todos los medios a nuestro alcance para extender la conciencia de que todos los seres humanos descendemos de una única pareja tocada con el milagro de la dignidad y libertad. Sobre esa base, podemos afirmar la fraternidad de todos y todas como base de un orden mundial justo.