Una organización ambientalista ha intentado socavar este domingo la Cumbre Mundial de la Salud en Berlín (Alemania), organizando una protesta frente al lugar del evento e interfiriendo en el sistema de seguridad.
El evento fue interrumpido brevemente con la activación del sistema de alarma de incendios, acto que llamó la atención del canciller alemán Olaf Scholz.
“Alguien ha pulsado la alarma de incendios. No apoyan nuestras discusiones. Hacen protestas sobre el clima y cosas así y piensan que eso mejoraría nuestras discusiones. Y creo que la mejor manera de mejorar las discusiones es no escuchar y seguir adelante“, dijo el líder alemán al subir el podio.
La cumbre continuó luego de que el sistema fuera desactivado. La organización Scientist Rebellion se adjudicó la responsabilidad de la acción, escribiendo en Twitter que “el fracaso climático de los gobiernos amenaza agudamente la vida, la seguridad y la salud del pueblo” por lo que la crisis climática es también “la mayor crisis sanitaria de la humanidad”.
Además, frente al hotel que acogía la cumbre dedicada, entre otros asuntos, a la lucha contra el covid y la poliomielitis, se congregaron algunos activistas, quienes usaron pegamento para adherirse a las puertas.
Los últimos días, otras protestas ambientalistas se han presentado en Europa. Así, un activista contra el cambio climático roció este domingo con pintura naranja el escaparate de un concesionario de automóviles del fabricante británico Aston Martin en Londres (Reino Unido).
Asimismo, el viernes, dos jóvenes activistas contra el calentamiento global arrojaron sopa a una pintura de Van Gogh en la Galería Nacional de Londres y se pegaron a la pared.
Fuente: RT China