En su conversación, el presidente ruso, Vladímir Putin, y su homólogo francés, Emmanuel Macron, abordaron temas como el conflicto en Nagorno Karabaj, la situación de Ucrania y las futuras relaciones entre Moscú y Bruselas, en un momento de fuertes tensiones entre Rusia y el bloque europeo.
Este viernes, los presidentes de Rusia y Francia abordaron diversos temas a través de una llamada telefónica en la que hablaron desde la situación de Ucrania y Libia hasta la relación entre Rusia y la Unión Europea en un momento de extrema tensión entre ambos.
De acuerdo con el Kremlin, los mandatarios hablaron sobre la situación de Nagorno Karabaj, el conflicto en el este de Ucrania, la guerra en Libia y la reciente cumbre entre Rusia y Estados Unidos, así como de asuntos comerciales y económicos entre Rusia y Francia.
El Kremlin destacó que “el presidente de Rusia llamó la atención sobre la necesidad de una mayor implicación de los socios europeos, incluida Francia, en la solución de los asuntos humanitarios de los habitantes de las regiones afectadas por la guerra” en la región de Nagorno Karabaj.
Ambos presidentes habrían coincidido en la importancia de formar una relación “constructiva y predecible” entre Moscú y Bruselas. Esto, indicaron, ayudaría a afrontar temas como la ciberseguridad, el terrorismo internacional, temas sanitarios y el cambio climático.
La guerra, la crisis política y las diferencias entre el este y el oeste, temas de la llamada
Vladímir Putin y Emmanuel Macron enfocaron su conversación en los países afectados por la guerra y la presión política. Además, destacaron las crecientes tensiones entre el este y el oeste y propusieron soluciones para evitar que los lazos se rompan entre estas dos regiones europeas.
Los presidentes llegaron a la conclusión de que la presencia de las fuerzas de paz rusas en Nagorno Karabaj, región en el seno de la reciente guerra entre Armenia y Azerbayán, ha ayudado a la estabilidad en la región.
En cuanto a Ucrania, el líder ruso resaltó la necesidad de que las autoridades de Kiev cumplan con lo establecido para solucionar los problemas que enfrenta este país. Putin insistió en dialogar con las repúblicas separatistas de Donetsk y Lugansk. Asimismo, reforzó la importancia de lograr una concesión de un estatus especial al Donbás, región histórica del este.
Por otro lado, Macron expresó su deseo de que Rusia y la Unión Europea puedan arreglar sus diferencias, a lo que Putin respondió que estaba dispuesto, siempre y cuando la UE muestre interés.
El líder francés también instó a su homólogo ruso a conversar sobre los resultados conseguidos luego de que Putin y el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, discutieran temas apremiantes en la cumbre que tuvo como sede a Ginebra en junio. Finalmente, destacaron las materias comerciales y económicas entre Francia y Rusia.
La conversación entre los mandatarios se da en un periodo de presión entre la Unión Europea y Moscú y sus países aliados. Los franceses y los alemanes propusieron a la Unión Europea conmemorar una cumbre con Rusia, pero rechazaron la sugerencia.
Sin embargo, Macron declaró que no vio la decisión con malos ojos. “No había consenso para una cumbre rápida. Desde mi punto de vista, no es un drama en absoluto. Lo más importante es que estamos estructurando esta agenda (de relaciones con Rusia) y que mantengamos la unidad, porque la división es lo que nos debilita”, dijo Macron tras la cumbre del bloque celebrada el pasado jueves y viernes en Bruselas.
Con EFE y Reuters
