El pasado lunes, 3 de enero, varios medios de comunicación informaron de un ataque contra un barco en el mar Rojo. Posteriormente y en la misma jornada, la llamada coalición que lidera Arabia Saudí contra Yemen acusó al movimiento popular yemení Ansarolá de haber “capturado” un barco, llamado Rawabi, con bandera de los Emiratos Árabes Unidos (EAU).

La llamada coalición saudí dijo que el cargamento del navío que se dirigía hacia Jizan, en Arabia Saudí, era “civil y médico”, ya que, reclamó, regresaba del archipiélago yemení de Socotra, frente a las costas meridionales de Yemen, luego de que había transportado material destinado a un hospital de campaña situado en el mencionado archipiélago.

Sin embargo, el portavoz del Ejército yemení, el teniente general Yahya Sari, anunció oficialmente la confiscación del barco emiratí, que transportaba armas militares, en las aguas del país a lo largo de la ciudad portuaria de Al-Hudayda (oeste).

El buque emiratí transportaba vehículos militares y barcos de guerra

El Ejército yemení que publicó el martes un vídeo de los armamentos descubiertos en el barco incautado, también ha emitido este sábado vídeos e imágenes de los viajes anteriores del buque emiratí mientras transportaba vehículos militares blindados y una variedad de armas.

Conforme a los datos ofrecidos por Saná, el buque emiratí cruzó el pasado 21 de noviembre las aguas territoriales de Yemen, dirigiéndose hacia el sur del país y transportando armamento y barcos de guerra más pequeños. Ha descargado su cargamento militar en el archipiélago yemení de Socotra, agrega el informe.

Fuerzas extranjeras, a bordo del barco emiratí

Las nuevas fotos demuestran además a las fuerzas extranjeras a bordo del buque incautado. Saná no ha revelado las identidades de estas tropas, pero algunos especulan que estos individuos son mercenarios afiliados a los Emiratos Árabes Unidos (EAU) y la coalición saudí, encargados de luchar contra las fuerzas yemeníes.

EAU forma parte de la coalición liderada por Riad que lanza desde marzo de 2015 una guerra devastadora contra Yemen, con la intención de restaurar en el poder al presidente fugitivo yemení Abdu Rabu Mansur Hadi.

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Mientras la llamada coalición no ha podido hasta el momento materializar sus objetivos, pese al apoyo integral que recibe del Occidente, especialmente Estados Unidos, las fuerzas yemeníes han dejado claro que seguirán sus operaciones contra Arabia Saudí y sus aliados, tanto en el territorio saudí como en los territorios ocupados por los mercenarios de la monarquía árabe, mientras los agresores no cesen su agresión y asedio contra el pueblo yemení.