“Creemos que la protección de los derechos humanos es parte de la naturaleza de la República Islámica, es decir, querámoslo o no, nos consideramos obligados a proteger la vida humana […] definitivamente lo haremos por los derechos humanos”, ha recalcado Seyed Ebrahim Raisi en una entrevista a las cadenas chinas CCTV y CGTN.

De este modo, en la entrevista, realizada al margen del 77.º periodo de sesiones de la Asamblea General de Naciones Unidas y publicada este miércoles, criticó la política de doble rasero del Occidente a la hora de abordar los derechos humanos cuando se trata en Irán y en sus propios países.

En particular, Raisi respondía a una pregunta sobre la trágica muerte de Mahsa Amini, de 22 años, acaecida el 16 de septiembre en un hospital días después de que fuera detenida por policías; tras el incidente, diferentes ciudades de Irán fueron escenarios de violencia callejera protagonizada por vándalos que se infiltraron en protestas por la muerte de la joven iraní, cuyo fallecimiento aún está bajo investigación.

Conforme lamentó Raisi, los que se presentan como adalides de los derechos humanos y usan la muerte de Amini como un pretexto para acusar a Irán de violar los derechos humanos, no prestan atención a tantas violaciones de los DD.HH. en sus propios países, donde ocurren muchas agresiones contra las mujeres.

Como ejemplo, el jefe del Ejecutivo persa se refirió a las violaciones de los derechos humanos realizados por EE.UU. contra los niños y las mujeres en la guerra de Afganistán, así como los crímenes cometidos por el régimen israelí contra palestinos.

Al indicar que el Gobierno iraní da la bienvenida a las protestas pacíficas en el país, Raisi puso énfasis en que, lamentablemente, lo que ocurre hoy día en Irán son disturbios provocados por los países occidentales y sus medios que incitan a la gente a alborotar.

“Los disturbios no son aceptables en ningún país. Ningún gobierno aceptará que se perturbe el orden de su país. ‘Provocar un incendio’ y ‘poner en peligro la vida de las personas’ no son protestas […] Irán es un país de libertad de expresión. Cuando los medios estadounidenses y europeos animan a la gente a amotinarse, esto significa inseguridad, asesinato y derramamiento de sangre. Esto ya no es una protesta, esto está alterando el orden del país y, naturalmente, este asunto no es soportable”, puntualizó.

Fuente: Hispantv