La portavoz de la Cancillería rusa, María Zajarova, en una conferencia de prensa en Moscú, la capital.
La portavoz de la Cancillería rusa señala que la situación de Afganistán demuestra la incapacidad de la OTAN y EE.UU. en coordinar sus acciones de manera efectiva.
“La situación en Afganistán ha demostrado gráficamente que ni la OTAN, en general, ni Estados Unidos, en particular, son capaces de coordinar efectivamente sus acciones. Además, EE.UU. ha demostrado ser absolutamente impotente como fuerza conductora”, ha indicado este viernes María Zajárova en un mensaje en la red social Facebook.
Al desarrollar su postura, Zajárova ha declarado que los videos de autodestrucción de la “invencible maquinaria” de la Organización del Tratado de Atlántico Norte (OTAN), demuestran plenamente que cualquier cálculo militar de este bloque es un “fracaso absoluto”, sobre todo por el hecho de que busca desempeñar el papel de liderazgo en la garantía del orden mundial.
“El declive de la Alianza Atlántica es obvio”, ha recalcado la alta diplomática rusa.
De igual modo, ha señalado que, la OTAN “a juzgar por su catástrofe en Afganistán”, intentará desviar la atención y, por eso, planea llevar a cabo una serie de ejercicios militares, especialmente en los países bálticos y de Europa del Este, a fin de fortalecer su presencia en el Ártico.
El presidente ruso, Vladimir Putin, afirma que el resultado de 20 años de guerra y ocupación de EE.UU. en Afganistán no ha sido más que “tragedias y pérdidas”.
Moscú culpa a Estados Unidos y a sus aliados de la OTAN por el caos en Afganistán. Kabul, la capital afgana, cayó el 15 de agosto a manos de los talibanes, en medio de la retirada atolondrada de las unidades militares foráneas.
- Rusia culpa a EEUU por la toma de Afganistán por los talibanes
El colapso de Afganistán ocurrió poco después de que comenzara la fase final de la retirada de las fuerzas de Estados Unidos, a la cabeza de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), que invadió el país centroasiático en 2001, so pretexto de luchar contra el terrorismo, deponer a Talibán y dar respaldo técnico al Ejército afgano. Sin embargo, además de no cumplir su objetivo, la situación se ha agravado con la ola de desplazados que buscan salir del territorio nacional por temor a una guerra civil.