El economista estadounidense Jeffrey Sachs, jefe de la comisión sobre el estudio del SARS-COV-2, acusó el martes a Washington de propagar la pandemia derivada del nuevo coronavirus, causante de la COVID-19.

En reacción, el presidente de la Duma Estatal (Cámara Baja del Parlamento) de Rusia, Vyacheslav Volodin, ha dicho que EE.UU. es responsable de la muerte de millones de personas, una crisis económica mundial y la caída en picado de los niveles de vida.

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“Estados Unidos debe rendir cuentas y compensar las pérdidas de todos los países que sufrieron la pandemia”, ha afirmado este miércoles en un mensaje publicado en su canal de Telegram.

Aludiendo al silencio del presidente de EE.UU., Joe Biden, respecto a las afirmaciones de Sachs, el titular ruso ha asegurado que el mandatario estadounidense tiene miedo de que el mundo sepa la verdad sobre el verdadero culpable de la pandemia.

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Washington y sus armas Biológicas en Ucrania

Los laboratorios biológicos de EE.UU., repartidos por el mundo, representan una amenaza para la humanidad, pues lo que allí se desarrolla puede generar una hecatombe contra la vida en nuestro planeta.

COVID-19; un error garrafal de la biotecnología

En un informe publicado el martes en la revista británica The Lancet, Sachs afirmó estar “bastante convencido” de que el virus “salió de un laboratorio de biotecnología” estadounidense.

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De acuerdo con el economista, COVID-19 es un “error garrafal de la biotecnología”, no de un desbordamiento natural, para luego añadir que existen “razones reales” por las cuales no se quiere investigar el origen del virus.