El expresidente de Rusia y actual vicejefe del Consejo de Seguridad del país, Dmitri Medvédev.
Rusia censura la postura hostil de Unión Europea en su contra respecto al acuerdo para exportar granos y dice que los europeos solo están preocupados por ellos mismos.
El vicepresidente del Consejo de Seguridad de la Federación Rusa, Dmitri Medvédev, ha denunciado este viernes las recientes declaraciones del jefe de la Política Exterior de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, quien pidió una reacción “firme” contra Rusia por la suspensión del acuerdo de granos.
“Borrell tiene una grave diarrea verbal sobre el acuerdo de granos. Como si todo fuera culpa nuestra, que estamos matando de hambre al planeta y privando de sus legítimos ingresos a los pacíficos ucranianos”, ha dicho el también expresidente ruso.
Tras recetar una “dieta estricta” a Borrell, incluyendo pan y agua, Medvedev ha subrayado que, cuando se trata del suministro de cereales a África, el jefe de la UE y todos los países miembros “se esconden en los arbustos” y solo sacan el tema del hambre cuando “ellos mismos se ven acorralados”.
Al aclarar su postura, el exmandatario ruso ha afirmado que Europa puede decidir que cumple finalmente las justas exigencias de comercio del grano ruso, o que modere su apetito.
Rusia anunció el 17 de julio la suspensión del acuerdo de exportación de grano a través del mar Negro desde puertos ucranianos, por incumplimiento de las obligaciones estipuladas en el documento y a la discordancia de la iniciativa con los fines planteados.
Esto, mientras que Moscú ha declarado en reiteradas ocasiones que, en virtud del acuerdo sobre cereales, la mayor parte de los suministros, en contra de lo acordado, van a parar a países europeos, con Ucrania recibiendo ingresos y los países más pobres de África son los que menos se benefician del pacto.
En este sentido, ofreció sustituir gratuitamente los suministros de cereales procedentes de Ucrania a los países necesitados tras retirarse del acuerdo.