Imagen de archivo del portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, durante una conferencia de prensa del presidente ruso, Vladimir Putin, tras una reunión del Consejo de Estado en Moscú, Rusia.© Thomson Reuters

El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, se refirió con efusividad a la importancia de China en los asuntos mundiales y afirmó que Moscú está prestando mucha atención al plan de paz de 12 puntos para Ucrania que Pekín publicó el mes pasado.

Las declaraciones de Peskov se produjeron después de que el ministro de Relaciones Exteriores chino, Qin Gang, afirmara que la crisis ucraniana parece estar dirigida por una mano invisible que presiona para extender y agravar el conflicto y lo utiliza “para servir a determinadas agendas geopolíticas”.

“Aquí probablemente podamos discrepar con nuestros camaradas chinos. Esto es, por supuesto, una broma. Ya saben cuál es el chiste: esto no es una mano invisible, es la mano de Estados Unidos de América, es la mano de Washington”, dijo Peskov.

“Washington no quiere que esta guerra termine. Washington quiere y está haciendo todo lo posible para continuar esta guerra. Esta es la mano visible”, agregó.

Moscú ha declarado en repetidas ocasiones que Estados Unidos y sus aliados están utilizando Ucrania para librar una guerra en su contra. Esta versión es rechazada por Kiev y Occidente, que afirman que Ucrania lucha por su supervivencia contra el acaparamiento de tierras por parte del imperio ruso.

En referencia a la iniciativa china de alto el fuego anunciada el mes pasado, Peskov afirmó que Moscú está en contacto permanente con Pekín.

“Un país grande, gigantesco, poderoso y con autoridad como China no puede dejar de tener su propia voz en aquellos problemas que ocupan un lugar destacado en la agenda mundial”, afirmó Peskov. “Prestamos gran atención a todas las ideas que escuchamos de nuestros colegas de Pekín”.

El tono deferente reflejó la creciente confianza de Moscú en China en un momento en que Occidente intenta aislar a Moscú y golpea su economía con sanciones. Los presidentes Vladimir Putin y Xi Jinping firmaron una asociación “sin límites” menos de tres semanas antes de que Putin enviara su ejército a Ucrania en febrero del año pasado.

China se ha negado a señalar a Rusia como agresor, mientras que a menudo critica a Estados Unidos por intimidar a otros países con sanciones. Al mismo tiempo, ha expresado su profunda preocupación por la posibilidad de que el conflicto se agrave o “se descontrole”.