“El despliegue conjunto de aviones de la Fuerza Aeroespacial de Rusia y de la Fuerza Aérea de Siria en el aeródromo de Al-Yirah permite proteger la frontera y garantizar la seguridad a la población de las regiones del norte y el noreste de Siria”, informó el lunes el Ministerio de Defensa de Rusia en un comunicado.

La ceremonia de la reapertura de la base tuvo un desfile militar que vio la participación de las fuerzas rusas y la presencia de aviones de combate y helicópteros.

La importancia de la base Al-Yirah

Daesh había tomado el control de esta pequeña base en 2014, pero en mayo de 2017, dicha instalación fue reconquistada por las fuerzas de Damasco.

Tras su retoma, los militares sirios y rusos instalaron los equipos necesarios y restablecieron la pista de aterrizaje que es apta para todo tipo de aviones militares.

Este aeródromo, por su ubicación, goza de un alto valor estratégico, ya que está a poca distancia de las zonas bajo el control de los grupos terroristas en Siria y los aviones sirios que despeguen desde ahí tendrán que recorrer distancias más cortas, lo que les permitirá reaccionar con mayor rapidez y, a la vez, ahorrar combustible.

Disuadir a Israel

Medios afiliados al Gobierno sirio, especulan que las operaciones conjuntas de Siria y Rusia para reactivar dicho aeropuerto buscan mejorar la capacidad militar de las fuerzas sirias ante las incursiones israelíes.

Por eso, Rusia ha desplegado los sistemas de defensa aérea “Buk” y “Pantsir” dentro del aeropuerto. Con estos sistemas, tanto Rusia como Siria pretenden disuadir a los aviones de ocupación israelíes, ya que solo durante 2022, este régimen llevó a cabo 34 agresiones aéreas contra el territorio sirio.