Ya se han recuperado 39 cuerpos en Las Tejerías, un pueblo arrasado por los aludes. Las lluvias continúan causando estragos en el país sudamericano y la temporada aún no ha terminado
Este martes comenzaron los cortejos fúnebres en Las Tejerías. Unas 31 urnas fueron llevadas a hombros y en coches en una caravana hasta el cementerio. Después del deslave que arrasó el sábado con este pueblo del estado Aragua, en el centro del país, la gente comenzó a enterrar a sus muertos. De los primeros 24 identificados, la cifra oficial de la tragedia continuada que han dejado las lluvias en Venezuela pasó a 39. Entre los cuerpos localizados recientemente hay cinco menores de edad, entre ellos, tres niños de 1 y 2 años, otro de 7 y un adolescente de 17 años. Al menos 56 personas continúan desaparecidas. “Estamos llegando a casi un centenar de víctimas fatales de esta tragedia”, dijo Nicolás Maduro este martes.
Las labores de rescate continúan. Este martes se hizo el hallazgo de cuatro cuerpos en el río Tuy, donde desembocan algunas de las quebradas de Las Tejerías, que se represaron con los aguaceros del fin de semana, arrastrando sedimentos, vehículos, rocas y enormes árboles. El gobernador del vecino estado Miranda, Héctor Rodríguez, confirmó la recuperación de los cuerpos y aseguró que podrían tratarse de algunos de los desaparecidos en Las Tejerías, donde viven unas 50.000 personas, a 67 kilómetros de Caracas. El municipio está asentado en el centro de lo que los geólogos llaman un abanico aluvial, por lo que lo que los desplazamientos de grandes flujos de sedimentos que arrastran lo que consiguen a su paso como si fuera una lava, pueden ser cíclicos. Los vecinos han denunciado que al menos 10 días antes, la quebrada que atraviesa el pueblo había crecido arrastrando viviendas, pero no se evacuaron las zonas en riesgo, que incluyen un parque industrial que quedó devastado.
La tragedia ha movilizado a los venezolanos y golpea a un país que ya estaba frágil tras arrastrar desde hace varios años una emergencia humanitaria provocada por la crisis política, económica y social durante los años más duros del chavismo. En Caracas se han dispuesto varios centros de acopio de ropa, enseres y alimentos para más de 10.000 familias entre los afectados por el corte de la electricidad y el agua durante el desastre y quienes perdieron sus viviendas. La Plataforma de Acción Humanitaria de las ONG desplegadas en estas tareas desde hace años, junto a algunas agencias de las Naciones Unidas, señaló en un comunicado que “ante las necesidades humanitarias generadas y frente a los pronósticos de más amenazas naturales aún por desarrollarse”, podrían escalar sus capacidades de respuesta y de prestación de servicios en las zonas vulnerables.
El impacto de esta intensa temporada de lluvias, potenciada por la formación de ondas tropicales en el Caribe, se ha acumulado y continúa generando estragos en distintas partes del país. Crecidas en el oriente y occidente han dejado más damnificados, hectáreas productivas anegadas, puentes caídos, derrumbes y otros 40 muertos en las últimas semanas, sin contar los de Las Tejerías. La autopista que conecta la capital con el principal aeropuerto del país también se socavó en un tramo, aunque no se interrumpió la circulación. La afectación abarca 14 estados y 41 municipios.
Maduro visitó Las Tejerías el lunes por la tarde y decretó tres días de duelo nacional. Se trata de una movilización poco usual del mandatario no suele salir de Miraflores, por temor a un magnicidio. Con un megáfono habló a la comunidad y aseguró que tendrían nuevas casas en dos meses y que todo el pueblo sería reconstruido. “Yo alerté hace 10 días en transmisión pública que tenía mucha preocupación por la forma en que se estaban saturando los suelos de agua y ordenamos revisar todas las montañas cercanas”, dijo el líder chavista y aseguró que la situación es “grave” y que “ha llovido tres veces más que en cualquier año”.
Pese a la gravedad de la situación, la cobertura de los medios ha estado limitada en la zona de Las Tejerías. El ministro de Interior y Justicia, Remigio Ceballos, pidió a los reporteros “no estorbar” y aseguró que los medios estatales que sí tuvieron pleno acceso garantizaban el derecho a la información. Las redes sociales han sido el primer canal para informarse sobre lo ocurrido, principalmente desde cuentas de periodistas locales. Los servicios meteorológicos han informado que ha comenzado a formarse una nueva onda tropical como la que la semana pasada se convirtió en el huracán Julia y dejó graves secuelas en Venezuela. La temporada aún no termina.