Senegal vive unos días convulsos tras las violentas protestas desatadas por la condena a dos años de prisión por corrupción de menores del líder de la oposición, Ousmane Sonko. Al menos nueve personas han muerto en Dakar y Ziguinchor tras los disturbios cuando cientos de jóvenes salieron este jueves a las calles de varias ciudades para protestar porque la condena impediría a Sonko presentarse a las elecciones presidenciales de 2024.
“Constatamos con pesar la violencia que condujo a la destrucción de bienes públicos y privados, y lamentablemente a nueve muertos en Dakar y Ziguinchor (sur)”, afirmó el ministro del Interior, Antoine Félix Diome, en una rueda de prensa a primera hora del viernes en la capital senegalesa.
“Deseamos expresar nuestro más sentido pésame a los familiares de las víctimas mostrando todo nuestro apoyo a los afectados”, señaló Diome.
El titular del Interior indicó que, “tras constatar en las redes sociales la difusión de mensajes de odio y subversivos”, el Gobierno decidió “suspender temporalmente el uso de determinadas aplicaciones digitales a través de las cuales se llama a la violencia y al odio”.
“El Estado de Senegal ha tomado todas las medidas para garantizar la seguridad de las personas”, agregó el ministro, quien pidió “calma y serenidad” a la población..
Las protestas se desarrollaron en diferentes barrios de Dakar, pero también en algunas localidades como Ziguinchor, Bignona (sur), Saint-Louis, Louga (norte), Kaolack (centro-oeste) y Mbour (oeste).
Los manifestantes erigieron barricadas utilizando neumáticos y vehículos en llamas, lanzaron piedras a las fuerzas policiales y llevaron a cabo actos de saqueo en comercios y edificios públicos. Como respuesta, las autoridades usaron gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes.
En un comunicado, el partido de Sonko, Patriotas de Senegal por el Trabajo, la Ética y la Fraternidad (PASTEF), señaló que el “veredicto por encargo es la última etapa del complot urdido por Macky Sall y sus secuaces contra el principal opositor de este país”.
PASTEF llamó a la movilización en todo Senegal y pidió a las fuerzas del orden y al Ejército ponerse del lado del pueblo.
Un tribunal de Dakar sentenció este jueves a Sonko a dos años de prisión por corrupción de menores tras ser acusado por una joven masajista, Adji Sarr, de “violaciones reiteradas” y “amenazas de muerte”.
Esta condena hace inelegible al opositor como candidato a las elecciones presidenciales previstas para febrero de 2024, según el Código Electoral senegalés.
El veredicto fue anunciado en un momento de protestas de sus seguidores, mientras Sonko se encuentra retenido en su domicilio de Dakar desde el pasado domingo rodeado por fuerzas del orden, una restricción que Amnistía Internacional calificó de ilegal.
Este procesamiento tuvo lugar después de que el líder opositor fuera condenado el pasado 8 de mayo a seis meses de prisión suspendida por difamación e injurias públicas a un ministro senegalés tras acusarlo de corrupción.
Sonko ha denunciado la “instrumentalización” de la justicia por parte de Macky Sall, que dirige el país desde 2012, con el fin de evitar que se postule a los comicios de 2024.
Conocido por su discurso “antisistema”, el dirigente opositor critica la mala gobernanza, la corrupción y el neocolonialismo francés y cuenta con muchos seguidores entre la juventud senegalesa.
