Ucrania sigue “una política destructiva (…), que se basa en la intensificación de las hostilidades, con el apoyo de sus patrocinadores occidentales, los cuales están aumentando los suministros de armas y equipos militares”, ha denunciado este lunes el presidente ruso, Vladímir Putin, en una conversación telefónica con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, según recoge el servicio de prensa del Kremlin.
Putin, además, ha criticado al Gobierno ucraniano por rechazar su oferta de detener los combates el día de Navidad, indicando que la decisión de rechazar una propuesta de alto el fuego es otra prueba de “la política hipócrita” de Kiev.
El servicio de prensa del Kremlin informa que Putin y Erdogan también han abordado un intercambio de prisioneros de guerra rusos y ucranianos, incluidos soldados heridos.
Por su parte, el mandatario turco ha reiterado su voluntad “para facilitar y mediar en el establecimiento de una paz duradera entre Rusia y Ucrania”.
El presidente de Rusia considera positiva la dinámica de la operación militar especial, que según el Kremlin es para desmilitarizar y desnazificar a Ucrania.
El 5 de enero, el presidente ruso ordenó una tregua desde el mediodía del 6 hasta 7 de enero por la Navidad ortodoxa. No obstante, el país eslavo rechazó el alto el fuego, calificándolo como “una trampa cínica y un elemento de propaganda”.
Rusia inició el 24 de febrero de 2022 una operación militar en Ucrania, según el Kremlin, en reacción a la conducta agresiva de Kiev en la región del Donbás (este de Ucrania) y el avance sin freno de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) hacia las fronteras rusas, ignorando las demandas de seguridad de Moscú.