La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha anunciado este viernes que la UE aportará hasta 35.000 millones de euros al préstamo de 50.000 millones de dólares (46.500 millones de euros) para Ucrania acordado en el marco de la cumbre del G7 y que se financiará con los intereses de los activos rusos congelados por las sanciones para contribuir a la recuperación del país.
El resto de socios del G7, en quienes Von der Leyen “confía” que “también harán su parte” porque “la urgencia es evidente”, deberá aportar la parte restante, aunque la Comisión podrá reducir después el importe de su contribución en función de las demás aportaciones si se exceden de los 50.000 millones de dólares acordados.
“Los incesantes ataques rusos significan que Ucrania necesita el apoyo continuo de la UE. La Comisión Europea proporcionará un préstamo de hasta 35.000 millones de euros a Ucrania como parte del compromiso del G7. Esta es otra contribución importante de la UE a la recuperación de Ucrania”, ha señalado Von der Leyen en X.
La presidenta ha realizado este anuncio desde Kiev, a donde ha viajado este viernes para reunirse con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, y con quien ha ofrecido después una rueda de prensa conjunta para anunciar este paquete, que aún requiere de la aprobación del Parlamento Europeo y de una mayoría cualificada de los Veintisiete antes de entrar en vigor.
Una vez aprobado, Von der Leyen ha comprometido “máxima flexibilidad” a Zelenski para el uso de esos fondos a fin de “satisfacer sus necesidades”, al tiempo que ha destacado que esta contribución “dará mas margen a sus recursos nacionales para aumentar las capacidades militares y defenderse de la agresión rusa”.
Una de las principales preocupaciones de Bruselas es la dificultad añadida que implica la renovación semestral del paquete de sanciones que mantiene inmovilizados los activos rusos, puesto que su aprobación está sujeta a la unanimidad del Consejo, lo que preocupa a algunos Estados miembro ante la posibilidad de países como Hungría de bloquear el acuerdo y descongelar los activos.
Según ha explicado un alto cargo de la UE, para evitar ese escenario, el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, propondrá un cambio legislativo a los 27 para modificar la vigencia de la congelación los bienes del Banco Central ruso y aumentarla considerablemente hasta los 36 meses.
La renovación actual es de solo seis meses, junto al resto de sanciones económicas contra Rusia, que no se verán afectadas por la medida. En todo caso, este paso será presentado a los Estados miembros, que tienen que dar su visto bueno por unanimidad.
La idea del Ejecutivo europeo es que el nuevo plazo de las sanciones arranque en enero de 2025, cuando empezaría el nuevo periodo de 36 meses en el que los bienes rusos estarán inmovilizados.
Por otro lado, la Comisión ha propuesto establecer un mecanismo de cooperación en materia de préstamos a Ucrania que apoyará a la UE y a los socios del G7 en la concesión de préstamos de hasta 45.000 millones de euros a Kiev a fin de garantizar su resiliencia económica.
Ucrania podrá utilizar este instrumento para reembolsar los préstamos elegibles de la UE y el resto de socios del G7 y ofrecerá al país apoyo financiado mediante el apalancamiento de la contribución financiera obtenida de los beneficios extraordinarios obtenidos de los activos inmovilizados del Banco Central de Rusia.