Un responsable yemení dice que el apoyo sólido de una potencia regional como Irán ha reforzado el poder y la resistencia de los yemeníes ante los agresores.
En una entrevista concedida este viernes a la agencia iraní de noticias Fars News, en lengua árabe, el ministro de Asuntos Exteriores del Gobierno de Salvación Nacional de Yemen, Hesham Sharaf Abdulá, ha destacado que el apoyo “sólido de una potencia regional como la República Islámica ha duplicado el poder, la resistencia” y el moral, del pueblo yemení, que lucha desde hace siete años para preservar su soberanía ante la llamada ‘coalición’ agresora al país árabe, liderada por Arabia Saudí.
“Irán fue el único país islámico que optó por defender la verdad y mostró su apoyo a Yemen y su pueblo frente a la agresión injusta” que sufren, ha destacado Sharaf Abdulá, felicitando al liderazgo, el pueblo y el Gobierno iraníes por el 43.º aniversario de la victoria de la Revolución Islámica (11 de febrero de 1979).
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Ha señalado que el triunfo de la Revolución Islámica con sus lemas de, “resistir la injusticia y la tiranía y alzar la voz contra los tiranos y elevar el estatus del Islam y los musulmanes, ha tenido un impacto positivo en la vida de la nación yemení”.
Un alto cargo yemení afirma que la Revolución Islámica convirtió a Irán en una potencia regional que apoya a las naciones oprimidas.
En cuanto a la influencia de la Revolución Islámica en la región de Asia Occidental, el ministro de Exteriores yemení ha dicho que este importante cambio geopolítico reforzó y envalentonó al eje de la Resistencia.
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Gracias a la Revolución Islámica, ha detallado, las naciones islámicas se convirtieron en actores influyentes e independientes y no solo ser un seguidor obediente que implementa las políticas de las potencias extranjeras.
Ha agregado que “la República Islámica de Irán a través de su camino sólido y fuerte y sus hombres capaces y el enfoque correcto, creó y sentó las bases para construir una potencia global que encontrará su lugar entre las principales potencias”.
Sharaf Abdulá ha concluido asegurando que, pese a estar sufriendo las consecuencias de la guerra económica y las sanciones y pese a todos los complots que buscan detener el progreso de Irán, el país persa seguirá avanzando el camino del éxito y se convertirá en una potencia global.
Este viernes, la Revolución Islámica de Irán cumple 43 años. El 11 de febrero de 1979, la revuelta de los iraníes, bajo el liderazgo del Imam Jomeini (que en paz descanse), logró poner fin a la monarquía Pahlavi, apoyada por Estados Unidos.
