Su precio accesible y su versatilidad hacen posible que este alimento sea uno de los más empleados en la dieta diaria de millones de personas alrededor del mundo, pero sus virtudes no culminan en ello, pues sus amplias propiedades le merecieron la calificación de superalimento capaz de aportar varios beneficios al organismo.
Rojas, blancas y cabezonas, son unas cuantas de las variedades que posee este alimento en el mercado de cientos de países. Lo cierto es que varios estudios se han centrado en la cebolla y el impacto que causa su consumo en el organismo. Esto ha llevado a más de un nutricionista a confirmar los beneficios que aporta en la salud mediante su consumo diario.
“Se trata de un apoyo para el sistema inmunológico, y un efecto beneficioso para el sistema digestivo y el sistema cardiovascular. Gracias a la combinación óptima de vitaminas y oligoelementos, las cebollas favorecen el trabajo de nuestro corazón. Además, tiene un efecto beneficioso sobre el sistema nervioso. Las cebollas pueden optimizar y activar el trabajo del cerebro”, explicó a Sputnik el nutricionista Alexéi Bobrovski.
Además, existe una infinidad de métodos para cocinarla y no acabar en lágrimas en el intento. Lo importante es consumirla, aunque Alexéi Bobrovski recomendó que lo más saludable es hacerlo cuando está fresca y cruda para que no pierda sus propiedades al momento de entrar en contacto con el agua caliente o el aceite caliente.