Mudo Social – Noticias del Perú
Medio Ambiente

Qué es la ashwagandha, para qué sirve y por qué está de moda

De repente, la ashwagandha está en todas partes. El creciente interés por la medicina natural, además del apoyo entusiasta de famosos e influencers ha provocado un aumento de la curiosidad por esta planta medicinal.

Pero la ashwagandha (Withania somnifera), también conocida como bufera o ginseng indio, no es nada nuevo; se utiliza en la medicina tradicional india, o Ayurveda, desde hace miles de años. Este poder de permanencia indica que mucha gente cree realmente que la hierba es buena para la salud, y los estudios científicos sugieren que la ashwagandha, voz en sánscrito cuya traducción literal es ‘aroma de caballo’, ofrece algunos beneficios para el estrés, la ansiedad, el sueño y otros aspectos de la salud en general.

“El cuerpo de la investigación en torno a productos botánicos como la ashwagandha es cada vez mayor, proporcionando la validación científica para su uso”, dice Melinda Ring, directora ejecutiva del Centro Osher para la Salud Integral de la Universidad Northwestern.

Pero el ginseng indio no es una panacea. La comunidad científica no está del todo segura de cuáles de los componentes bioactivos de la planta ayudan, ni de cómo actúan exactamente. Y los suplementos como la ashwagandha no son beneficiosos para todo el mundo; en Ayurveda, estas hierbas se prescriben en función de los síntomas, la constitución y los antecedentes médicos de cada persona, explica Chiti Parikh, cofundadora de Salud Integral del Hospital Presbiteriano de Nueva York – Weill Cornell Medicine (Estados Unidos). Parikh también advierte de que un mal uso de la ashwagandha puede producir efectos adversos.

La ashwagandha es un arbusto de hoja perenne. “La ashwagandha se utiliza desde hace siglos para diversos problemas de salud”, afirma Parikh; “a menudo se la denomina adaptógeno, lo que significa que ayuda al organismo a adaptarse a los factores estresantes y restablecer el equilibrio. Sus otros beneficios son reducir la inflamación, aumentar la energía, aliviar la ansiedad y mejorar el sueño.”

Se cree que la ashwagandha actúa regulando la respuesta del organismo al estrés y reduciendo la inflamación mediante componentes activos que incluyen alcaloides, lactonas y compuestos esteroideos.

“Las distintas partes de la planta ashwagandha, como la raíz, las hojas y las bayas, pueden tener distintas concentraciones de compuestos bioactivos”, explica Parikh. Entre ellos destacan los withanólidos, compuestos esteroideos naturales asociados a efectos antioxidantes y antiinflamatorios beneficiosos para el organismo. “Las investigaciones sugieren que los extractos estandarizados que contienen una alta concentración de withanólidos son los más eficaces”, afirma Parikh.

Ring señala que estos componentes bioactivos pueden influir en las vías de señalización, las reacciones químicas que guían la función celular. “Sin embargo, los mecanismos precisos a través de los cuales la ashwagandha ejerce sus variados efectos siguen siendo un área de investigación activa”, dice.

La creciente investigación científica sugiere que, sean cuales sean los mecanismos, algunas personas pueden beneficiarse del consumo de esta planta.

Varios pequeños estudios científicos sugieren que la ashwagandha puede ayudar a aliviar el estrés. Una revisión de 2021 recopiló los resultados de siete estudios distintos en los que participaron 491 adultos de la India. Los participantes que sufrían estrés y ansiedad tomaron un placebo o diversos extractos de raíz u hojas de gingseng indio durante seis a ocho semanas. Los participantes que tomaron ashwagandha informaron de una reducción significativa de los niveles de estrés y ansiedad, al igual que los de otros estudios en los que participaron 250 adultos de la India y Estados Unidos.

Ring afirma que estos estudios clínicos “ofrecen pruebas prometedoras” de la capacidad de la ashwagandha para reducir la ansiedad, pero añade que “debe abordarse como parte de un plan de tratamiento integral que puede incluir terapias convencionales, modificaciones del estilo de vida y otras medidas de apoyo”.

El nombre de la especie, somnífera, procede del término latino para inducir el sueño, lo que sugiere que la planta ha sido estimada durante mucho tiempo por esta propiedad. Los estudios sobre el sueño que confirman este efecto también son pequeños pero prometedores. En una revisión de 2021 de cinco estudios de investigación independientes, todos ellos en la India, 372 adultos tomaron extracto de ashwagandha o un placebo. Los autores informan de un efecto “pequeño pero significativo” en la mejora de la duración y la calidad del sueño, sobre todo entre quienes padecían insomnio.

Los estudios realizados en ratones sugieren que el trietilenglicol, un compuesto que puede aislarse de las hojas de ashwagandha, podría favorecer de algún modo el sueño, tal vez al incidir en los receptores GABA que desencadenan un efecto calmante en el cerebro al bloquear la actividad de las células nerviosas asociada al estrés o al miedo.

“También se descubrió que el extracto de ashwagandha mejora la agudeza mental al levantarse, y no se registraron efectos secundarios graves”, afirma Ring.

Otros estudios, anteriores y en curso, han explorado los posibles beneficios de la hierba como ayuda para la artritis, la salud sexual y la infertilidad masculina, la diabetes y la cognición, incluida la capacidad de atención y la memoria. En la mayoría de los casos, se necesitan más datos.

Related posts

El largo camino del agua en el Amazonas

Andres Vanegas

Atrapar el CO2 en la atmósfera: tecnología en pleno desarrollo

Andres Vanegas

Los aborígenes australianos están luchando por salvar al pez sierra de la extinción

Andres Vanegas

Leave a Comment