El presidente argentino, Alberto Fernández, está desde el domingo en EE.UU., donde se reunirá el miércoles con su homólogo Joe Biden, en el primer encuentro bilateral que sostienen los mandatarios.
La reunión fue confirmada por la Casa Blanca el sábado en un comunicado, según el cual ambos mandatarios “celebrarán los 200 años de relaciones bilaterales entre EE.UU. y Argentina y reiterarán la fortaleza de la asociación”. También abordarán “áreas de interés nacional mutuo”, entre ellos la minería, el cambio climático y la tecnología.
El encuentro, que durará una hora y culminará con una declaración conjunta, estaba previsto para julio de 2022, pero tuvo que posponerse porque Biden dio positivo al coronavirus. Desde entonces, no se había fijado una nueva fecha.
El mandatario izquierdista llegó a Nueva York el domingo por la tarde, acompañado entre otros por la primera dama Fabiola Yánez y el canciller Santiago Cafiero, después de participar en la Cumbre Iberoamericana en Santo Domingo.
Antes del encuentro bilateral con Biden en la Casa Blanca, Fernández realizará en Nueva York varias actividades, entre ellas, una recepción de científicos en el consulado argentina, una visita a la muestra de Marta Minujín en el MoMA y una cena con una treintena de inversores en el Council of the Americas.
Desde que Biden asumió el poder en 2021, ambos líderes se han encontrado en varios ocasiones, como la reunión del G20 en Roma, en octubre de 2021, y la del G7 en Munich, en junio de 2022.
La reunión del miércoles se da en un momento delicado para Fernández, con la economía argentina afectada por una inflación anual de más del 100 % en febrero, y las elecciones de octubre en el horizonte.
Según la agencia Télam, Fernández, cuyo gobierno busca renegociar la deuda con el Fondo Monetario Internacional, expondrá a su par estadounidense su preocupación por la sequía en Argentina, que podría afectar a la llegada de divisas al país por la caída de las exportaciones en la próxima cosecha, lo cual deja en el aire las metas acordadas con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
“Nuestro objetivo es insertar a la Argentina en las cadenas de valor estratégico, abrir un sendero posible de inversiones en energía, minería y alimentos, y recuperar mercado de los Estados Unidos para las economías regionales”, aseguró el canciller Santiago Cafiero.