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Opinión

Jorge Manco Zaconetti: Apoyo del Gobierno: con una guerra sucia contra Petro Peru

En verdad, existe una campaña infame contra PetroPerú que se manifiesta en diversos medios de comunicación, voceros de la derecha, ex ministros de economía y ex presidentes del directorio de PetroPerú, que cuestionan el apoyo financiero otorgado por parte del gobierno del profesor Pedro Castillo a la petrolera estatal. ¡Salvataje financiero a una petrolera que no produce petróleo y gas!
Apoyo necesario pero insuficiente para superar la crisis de liquidez, el déficit del capital de trabajo y evitar el desabastecimiento de combustibles en el mercado interno, en especial a las regiones donde no llega la competencia de las transnacionales de Repsol, Valero ni Exxon/Mobil.
Una empresa petrolera estatal sin producción propia de petróleo y gas natural está condenada a vivir de márgenes de refinación, que hoy por la coyuntura internacional en especial por los efectos causados por la guerra Rusia/Ucrania se mantienen altos. ¡Más de US $ 20 dólares por barril refinado!
Es más, creemos que el aporte de capital de US $ 1,000 millones de dólares o S/ 4,000 millones de soles más un crédito de US $ 500 millones dólares para financiar las compras de combustibles resultarán insuficientes según los estados financieros no auditados al mes de setiembre del 2022, donde el déficit de capital de trabajo (activo corriente menos pasivo corriente) se ha incrementado de (- US$ 1,035 millones) a junio para aumentar a (-US$ 1,388 millones a setiembre.
Este salvavidas otorgado a regañadientes por el ministro de economía y finanzas, el ex izquierdista Kurt Burneo ha sido posible por la presión de Palacio de Gobierno, ante los mayores ingresos tributarios que está obteniendo el gobierno y las boyantes reservas internacionales que superan los US $ 75 mil millones de dólares, y el bajo coeficiente de deuda pública externa en relación al valor del PBI. Esta última según datos oficiales está por debajo del 38%, uno de los más bajos en América Latina, las cuales expresan la solidez macroeconómica del país.
El gobierno ha entendido que no puede dejar caer a PetroPerú sin poner en riesgo la estabilidad económica del país, pues es la única empresa que abastece el mercado interno, y a las fuerzas armadas con crédito. Es más, entre impuestos recaudados directamente e indirectamente más los impuestos de tercera categoría, cuarta y quinta le genera al fisco más de 6 mil millones de soles anuales.
Todas las críticas oficiales y no oficiales, de falsos líderes de opinión, de la prensa concentrada que fueron obsecuentes con la corrupción fujimorista que le costó al país un promedio de US $ 2,500 millones de dólares anuales en la década de la infamia 1990 al 2000, según el historiador Alonso Quiroz con la información disponible en su libro “Historia de la Corrupción”, obra que todos los peruanos debieran leer en especial los “padres de la patria” que tienen una aprobación más baja que el Presidente de la República.
Se cuestiona el alto costo de la Nueva Refinería de Talara que será superior a los US $ 5,500 millones de dólares, y que debe estar operativa en diciembre, y a plena capacidad en marzo del 2023. Y que será más rentable que lo proyectado gracias a los altos márgenes de refinación vigentes.
Según el Informe presentado a la “Comisión de Presupuesto y Cuenta General de la República” el pasado viernes 8 de noviembre se expone que “Con la Nueva Refinería Talara PetroPerú S.A. volverá a ser un refinador importante en el Perú, pudiendo ofrecer mejores condiciones comerciales y mejorando sustancialmente su rentabilidad y liquidez. EL EBITDA estimado para el 2023 es US $ 500 MMUS$”
Esto  significa que las utilidades antes de impuestos, antes del pago de intereses, y deducciones por concepto de depreciaciones y amortizaciones serán superiores a los US $ 500 millones el 2023 por lo menos. Sin embargo, las utilidades serían mayores si tuviese producción propia de petróleo y gas natural.
INTEGRACIÓN VERTICAL
Con una producción propia de 25 mil barriles diarios de crudo ligero y 20 millones de píes cúbicos diarios de gas que se producen en Talara, en los contratos próximos a su vencimiento, tales como lotes I, II, V, X, XV y Z-2B, PetroPerú podría obtener una renta petrolera, una ganancia de US $ 300 millones de dólares anuales como mínimo, deducidos los impuestos, regalías y participaciones a los trabajadores.
Los críticos a la construcción de la Nueva Refinería de Talara que está en 99 % de avance en lo referente a las unidades de proceso o parte principal, y a un 95.37 % en la construcción de las unidades auxiliares a la primera semana del mes de noviembre, se interrogan y algunos denuncian los altos costos económicos y financieros, obviando la complejidad de la refinería.
Se debe recordar el caso de la construcción del Oleoducto Norperuano una obra de jerarquía mundial con más de 1,000 kilómetros de extensión que inicialmente fue proyectado a un costo de US $ 600 millones de dólares, y terminó costando US $ 1,200 millones de dólares, Costo que lo asumió íntegramente la petrolera estatal pagando el financiamiento del gobierno japonés.
El Oleoducto Norperuano entre 1977 y el 2021 ha hecho posible la valorización de casi 1,000 millones de barriles de crudo provenientes sobre todo de los lotes 1-AB de la OXY-Pluspetrol y del lote 8 que estuvo bajo responsabilidad de PetroPerú, privatizado en 1996 a favor de Pluspetrol y ahora en abandono.
Se calificó la construcción del Oleoducto Norperuano como “elefante blanco”, una inversión innecesaria. Sin embargo, esta inversión hizo posible la valorización de casi 1,000 millones de barriles por un valor estimado a los dólares del 2010 por US $ 60 mil millones de dólares, que significaron impuestos y regalías para el estado, salarios para sus trabajadores y utilidades para las empresas.
Con la Nueva Refinería de Talara en pleno funcionamiento el próximo año se producirán 45 mil barriles diarios de diésel 2 limpio de azufre y un promedio de 26 mil barriles diarios de gasolinas limpias también, fuera del GLP, turbo etc.
La ventaja que tendrá PetroPerú frente a la dura competencia de Repsol “La Pampilla” – transnacional que hasta ahora no paga sus multas de contaminación del mar de Ventanilla y del norte chico, y que ha sido denunciada por el Indecopi por una reparación de US $ 4,500 millones de dólares- será múltiple.
Los productos de la Nueva Refinería de Talara serán limpios como los productos de la Refinería La Pampilla, pero además procesará petróleos pesados que son los más abundantes en el país; también procesará los crudos residuales para tener más diésel y gasolinas, e incluso podrá tratar la nafta, una especie de gasolina cruda que exporta Pluspetrol Corporation.
Es decir, será una refinería altamente rentable para el país, y la “ derecha bruta y achorada” demanda su privatización para satisfacer los intereses privados en especial de las empresas transnacionales.
Este artículo fue publicado en el Diario Uno el 12 de noviembre del 2022

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