Grabamos este episodio el viernes 16 de diciembre. A un día de iniciado el Estado de Emergencia en Perú. Un día y una cifra de asesinados de espanto por la REPRESIÓN desplegada desde el Gobierno y su partido: las Fuerzas Armadas. Una REPRESIÓN avalada por discursos que deslegitiman a compatriotas: el terruqueo. Había entonces 18 asesinados. Hoy sabemos que, en cifras oficiales, esa cifra ha aumentado perversamente y que no se trata de una constatación numérica, sino de la sumatoria de historias, sueños, deseos, familias, amores, dolores, vidas.
Desde ‘La batalla de las palabras’ no vamos a ser indiferentes y, por eso, preparamos dos episodios especiales que rompen la habitualidad de nuestra programación semanal. La semana pasada analizamos el sintagma “golpe de estado” y hoy analizamos la palabra ‘REPRESIÓN’. Una palabra que hoy nos duele especialmente porque no hablamos de una acción abstracta, sino de consecuencias reales y concretas en nuestra vida aunque la indiferencia de las diversas instancias del poder sean tan elocuentes.
¿Sabías que ‘REPRESIÓN’, en sus orígenes etimológicos, no sólo nos habla de bloquear o detener acciones concretas? ‘REPRESIÓN’, en realidad, hace alusión al retroceso. A la acción de detener pasos hacia adelante y hacia el progreso en la sociedad como bien nos dice Jaime Rodriguez Z. en la sección étimo. Y eso es exactamente lo que estamos viendo en Perú. Una intención de hacer retroceder los avances democráticos de un pueblo movilizado con la intención de nada más y nada menos que PARTICIPAR en la toma de decisiones de su país.
Con este episodio nos despedimos por este 2022, pero volvemos en enero para seguir sumándonos desde La batalla de las palabras a LA BATALLA DEL PUEBLO. Porque no son tiempos para ser indiferentes y las palabras nunca lo son. Hoy hablamos de la palabra REPRESIÓN en un Perú que está sufriendo estas violencias a diario.