Parlamentarios aprovechan discrecionalidad presupuestal para pedir televisores, sandwicheras y otros electrodomésticos para sus despachos.
En lo que va del año, el Congreso ha gastado el 10.2% de su presupuesto asignado en la adquisición de bienes y servicios, según Transparencia. En el cuarto trimestre del 2022, llegaron al 58.1% del monto destinado a tal fin.
Este presupuesto es aprovechado por los parlamentarios, quienes tienen la facultad de solicitar bienes para sus eventos o sus despachos. Desde un arreglo floral, hasta un Smart TV o una sandwichera.
CARETAS accedió a la lista de requerimiento de bienes hechas a Oficialía Mayor del Congreso, desde el 1 de enero del 2022 al 31 de enero del 2023. Llama la atención la cantidad de parlamentarios que pedían televisores para sus despachos. Estas solicitudes suman S/.138,350, pese a que no se resolvieron todos los pedidos.
Allí se encuentran Víctor Cutipa (Perú Libre), Raúl Huamán (Fuerza Popular); Silvia Monteza y Juan Mori, (Acción Popular), quienes fueron consultados por CARETAS y no respondieron al cierre de esta nota.
Otras de las solicitantes fueron Patricia Chirinos (Avanza País), Rossangella Barbarán (Fuerza Popular), Marley Portero (Acción Popular) y Flor Pablo (electa por el Partido Morado). Las tres últimas sí dieron su versión para este informe y aseguraron no haber recibido el electrodoméstico, pese a que lo pidieron en diciembre y noviembre del año pasado, respectivamente.
Desde el despacho de Pablo Medina, señalaron que desistieron de pedir el televisor y que entre sus miembros, harán una colecta para reparar el que tienen, desistiendo del pedido de uno nuevo. Señalan que necesitan el electrodoméstico para seguir en tiempo real, las votaciones de las diferentes comisiones y del Pleno.
Portero López dio la misma explicación y consideró que el Parlamento debe ser más austero. Señaló que en el Parlamento se ha discutido sobre la cantidad de efectivos policiales que tiene la Mesa Directiva para su resguardo y que este número debería reducirse y suprimirse durante los fines de semana.
Pero no solo de televisores vive el hombre. Entre los pedidos también resaltan las sandwicheras y cubiertos pedidos por Chirinos Venegas, los frigobares, los hornos de microondas, los dispensadores eléctricos para el agua fría y caliente, entre otros enseres.
Esto se suma al reciente pedido de José Arriola (Acción Popular), quien pidió otro televisor y dos ventiladores para “optimizar” su labor parlamentaria.
César Delgado Guembes, ex oficial mayor del Parlamento, explicó que los congresistas pueden pedir bienes, siempre y cuando estén contempladas dentro del presupuesto. Si el bien no está contemplado la Oficina de Planeamiento y Presupuesto se encargaría de evaluar la solicitud, realizando el “control de calidad del gasto público”. “Si no existe previsión presupuestal, no se autoriza el gasto”, sostuvo.
Añadió que los congresistas deben dar cuenta del estado en que dejan los bienes que les asignó el Parlamento y que la Oficina de Control Patrimonial del Parlamento hace controles mensuales.
Delgado Guembes concluye que el gran problema del Parlamento no son los recursos empleados en el trabajo de los congresistas, sino su calidad y cuestionó que actualmente, hayan más de 3 mil trabajadores, siendo que el Congreso podría funcionar con entre 200 y 500 funcionarios. También criticó que la calidad representativa disminuyó a partir de 1995, ya que ahora los parlamentarios delegan sus tareas a sus asesores. “¿En realidad quién te está representando en el Estado, el congresista o sus asesores?”, cuestionó.
