Katherine Rafael, apodada “la reina de los pasaportes”, fue señalada por el Ministerio Público por presuntamente liderar una organización que operaba en varias regiones, mientras que el congresista David Jiménez evitó dar declaraciones sobre su vinculación
El congresista David Jiménez Heredia, miembro de la bancada de Fuerza Popular, está en el centro de un escándalo político. Según una investigación de Panorama, su despacho contrató a Katherine Sharelly Rafael Riveros, señalada por el Ministerio Público como presunta cabecilla de la organización criminal “Los Diamantes Azules”. Rafael Riveros, conocida como “la reina de los pasaportes”, enfrenta investigaciones por delitos como tráfico de influencias, peculado y organización criminal.
Las autoridades señalan que la joven, en su rol como jefa zonal de Migraciones en Junín, facilitó trámites irregulares de pasaportes, carnets de extranjería y permisos temporales de permanencia, muchas veces a cambio de dinero. Además, habría colaborado en trámites exprés para personajes investigados, incluido Vladimir Cerrón, quien actualmente se encuentra prófugo. Según Harvey Colchado, Rafael también facilitaba el ingreso irregular de ciudadanos extranjeros y filtraba información confidencial de operativos migratorios.
Silencio frente a las acusaciones
Ni el congresista Jiménez ni Katherine Rafael respondieron a las preguntas. El equipo periodístico del dominical intentó obtener sus versiones, pero ambos evitaron dar declaraciones. En uno de los encuentros con la prensa, Jiménez se retiró apresuradamente, subiendo a su vehículo mientras las cámaras registraban su negativa a responder.
Rafael, quien ahora trabaja en el Congreso, tampoco explicó cómo terminó su proceso judicial o por qué consiguió este empleo pese a sus antecedentes. La información oficial indica que percibía un salario de S/ 7.369 mensuales en su nuevo puesto, un ingreso que proviene de los impuestos de todos los peruanos.
Un pasado rodeado de polémicas
Intervienen oficina zonal de migraciones de Huancayo por presunto favorecimiento a extranjeros y a Vladimir Cerrón (RPP)
En junio de este año, Katherine Rafael estuvo en el foco de un megaoperativo liderado por la División de Investigación de Delitos de Alta Complejidad (DIVIAC). La fiscalía sostiene que Rafael dirigía “Los Diamantes Azules”, un grupo que operaba en la región de Tumbes y facilitaba el ingreso ilegal de extranjeros, muchos de ellos provenientes de países como Ecuador, Colombia y Venezuela.
Además de gestionar documentos de identidad y pasaportes de manera irregular, las autoridades sostienen que alertaba a ciudadanos extranjeros sobre operativos migratorios, atentando contra la seguridad nacional. Según una transcripción incluida en la investigación, Rafael coordinaba estos trámites con mensajes telefónicos que detallaban instrucciones para evitar controles.
El operativo que buscó desarticular “Los Diamantes Azules” incluyó el allanamiento de siete inmuebles, entre ellos la vivienda de Rafael y la sede de Migraciones en Huancayo. En su domicilio, la policía encontró más de S/ 14 mil soles en efectivo, presuntamente obtenidos como resultado de actividades ilícitas.
La fiscalía presentó una tesis que detalla cómo, desde 2019, Rafael utilizaba su cargo para coordinar actividades de corrupción. Además, la investigación señala que facilitó un pasaporte a Vladimir Cerrón en tiempo récord, un trámite que habría sido clave para eludir a las autoridades.
Separación del cargo
Tras la difusión del reportaje, la situación cambió. Según el medio, Katherine Rafael fue separada del despacho de Jiménez. Sin embargo, las fechas revelan un detalle cuestionable: mientras el comunicado oficial indicaba que fue apartada el 20 de noviembre, imágenes muestran que todavía ingresaba al despacho del congresista el día 21, lo que generó dudas sobre la veracidad de la decisión.
La red encabezada presuntamente por Rafael tenía un esquema de funcionamiento que se extendía por varias regiones del país. Los ciudadanos extranjeros que buscaban ingresar a Perú lo hacían pagando por trámites irregulares, coordinados directamente con Rafael o a través de sus colaboradores.
Entre los nombres señalados como parte de la organización también figura Yasser Julio Zulueta Galarraga, médico cubano que habría actuado como tramitador. Según las autoridades, este esquema operaba con la colaboración de personal de Migraciones que, bajo la dirección de Rafael, aceleraba los procedimientos a cambio de sobornos.