Delia Espinoza sostiene que la Junta de Fiscales Supremos ha vulnerado su derecho a ejercer un cargo al que accedió por concurso público y por el que fue designada por la Junta Nacional de Justicia en noviembre del 2022. El Ministerio Público alega no contar con presupuesto para su puesto, pero designa fiscales provisionales en plazas que pudo ocupar ella.
Desde la Junta de Fiscales Supremos, presidida por la Fiscal de la Nación, Patricia Benavides, le niegan a la magistrada suprema Delia Espinoza la posibilidad de ocupar la plaza, de fiscal suprema titular, que ganó a través de un concurso público. Y es que hace casi un año ella fue designada por la Junta Nacional de Justicia (JNJ) para ocupar una de las fiscalías supremas del Ministerio Público, pero en lugar de ello fue enviada como representante de la institución ante el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) alegando problemas presupuestales que no han sido sustentados.
Así lo detalló el abogado defensor de Espinoza, Fernando Velezmoro, quien explicó que, por una serie de negativas, han presentado una demanda de amparo contra la Junta de Fiscales Supremos, a fin de que reconozcan las solicitudes de la Fiscal Suprema Delia Espinoza para retornar al Ministerio Público.
“Lo que persigue la doctora Delia Espinosa es que se le designe como encargada de alguna de las fiscalías supremas que se encuentran vacantes al interior del Ministerio Público, ya que ella fue nombrada por la Junta Nacional de Justicia, previo concurso público, el 2 de noviembre del 2022 como fiscal suprema titular. Esto es importante en una institución con altos números de fiscales provisionales, ya que el problema con ellos es que el inicio de su designación y el término de esta es que está sujeta a una decisión, precisamente, de la Fiscal de la Nación. Por eso la provisionalidad siempre en la historia de Perú ha sido un problema porque es una manera de ejercer cierto control sobre los fiscales y es una amenaza contra la autonomía porque si mañana este fiscal provisional es molesto lo cambian por otro”, señaló Velezmoro a Infobae Perú.
El letrado relata que el pasado 3 de noviembre del 2022 se realizó una Sesión Ordinaria de la Junta de Fiscales Supremos, a donde fue invitada la magistrada Delia Espinoza, que acababa de ser nombrada (el día anterior) por la Junta Nacional de Justicia.
El primer problema fue que la invitación fue realizada de manera informal, a través de comunicación vía Whatsapp y sin conocimiento de la agenda a tratar ni de los documentos sustentatorios. Con tres votos a favor (el de Patricia Benavides, Pablo Sánchez y Juan Villena) y bajo el argumento de la inexistencia de plazas presupuestadas al interior de la Junta de Fiscales Supremos en la que pueda ser designada la nueva Fiscal Suprema Delia Espinoza, así como la supuesta imperiosa necesidad de que un Fiscal Supremo Titular tenga que ser designado como representante del Ministerio Público ante el Jurado Nacional de Elecciones, la Junta de Fiscales Supremos le impone su designación ante dicho organismo, por lo que ella no ha podido ejercer su función fiscal.
Así, la demanda de amparo sostiene que hacia el 3 de noviembre de 2022 sí existía por lo menos una plaza presupuestada disponible en la cual podía ser designada la magistrada Delia Espinoza. Este era el Despacho de la Fiscalía Suprema Especializada en Delitos Cometidos por Funcionarios Públicos que hasta el 30 de junio de 2022 venía siendo ocupada por Patricia Benavides Vargas, fecha en la que fue elegida Fiscal de la Nación.
Luego, el 22 de junio de 2023 la magistrada Delia Espinoza solicitó nuevamente su incorporación a la Junta de Fiscales Supremos al constatarse nuevamente una plaza vacante: la dejada en la Segunda Fiscalía Suprema por la Dra. Zoraida Avalos Rivera al ser inhabilitada por el Congreso de la República por cinco años para el ejercicio de la función pública. Sin embargo, la junta nuevamente rechazó el pedido de la Magistrada Delia Espinoza, bajo el argumento de que se encontraba en trámite el pedido de pago de remuneraciones de la doctora Ávalos Rivera.
El abogado Fernando Velezmoro advierte que actualmente, tanto la Segunda Fiscalía Suprema Penal como la Fiscalía Suprema Especializada en Delitos Cometidos por Funcionarios Públicos se encuentran a cargo de fiscales provisionales —por disposición de la fiscal de la Nación Patricia Benavides— en lugar de que se designe en dichas plazas a una fiscal suprema titular, como la magistrada Delia Espinoza Valenzuela.
Además, hoy por hoy la Junta de Fiscales Supremos está integrada apenas por tres fiscales, tras la inhabilitación de Zoraida Ávalos, cuando el cuadro presupuestal de personal determina que haya por lo menos cuatro titulares. “Ellos incurren en un error, no sabemos si es con con culpa o con dolo, al decir que la Dra. Patricia Benavides ejerce doble cargo tanto de fiscal de la Nación como de fiscal suprema especializada en delitos cometidos por funcionarios públicos, pero eso no es cierto porque precisamente los documentos internos oficiales determinan una clara diferencia entre la fiscal de la Nación y los cuatro fiscales supremos”, señala Fernando Velezmoro.