El presidente de Perú Libre, el partido que aupó al presidente, califica de “golpe de Estado en marcha” la decisión
El día en que se iba a votar por tercera vez su moción de censura, el presidente de Perú, Pedro Castillo, ha anunciado “la disolución del Congreso de la República” a través de un mensaje a la Nación. El presidente ha decretado un “Gobierno de excepción”, la reestructuración del Poder Judicial y el toque de queda nocturno. Castillo, que asumió el poder en julio de 2021, anunció también la próxima convocatoria de elecciones al Congreso para aprobar una nueva Constitución.
La medida ha provocado el rechazo de las distintas fuerzas políticas, incluso del partido que lo llevó al poder, Perú Libre, por ir en contra de la democracia. Vladimir Cerrón, presidente de la formación, ha asegurado: “Perú Libre no apoyará golpe de Estado en marcha, estamos contra el hiperparlamentarismo, la prensa no es confiable en el país, ningún testimonio está corroborado, pero tampoco ponemos la mano al fuego por el presidente Castillo”.
Perú vive momentos de extrema tensión. Algunos locales comerciales han comenzado a cerrar sus puertas y la gente se ha lanzado a las calles para regresar a sus casas, mientras multitud de padres se dirigen a los colegios para recoger a sus hijos. Una hora después del mensaje de Castillo, aún no se veía policía por las calles. Este martes, un día antes de que se anunciara la disolución del Congreso, Walter Córdova Alemán, renunció a su cargo como Comandante General del Ejército por “motivos estrictamente personales”. No brindó mayores detalles, pero la decisión dejaría vía libre a Castillo para designar a un nuevo comandante.
Castillo ha asegurado en su mensaje que se realizarán nuevas elecciones congresales y Perú se regirá bajo una nueva Carta Magna. “Convocaremos en el más breve plazo a elecciones para un nuevo Congreso con facultades constituyentes para elaborar una nueva Constitución en un plazo no mayor de nueve meses. A partir de la fecha y hasta que se instaure el nuevo Congreso se gobernará mediante decretos ley”, ha añadido.
El presidente sostiene que ha tomado la decisión de “un Gobierno de excepción” para “reestablecer el Estado de Derecho debido al reclamo ciudadano a lo largo y ancho del país”. Se ha decretado un toque de queda a nivel nacional desde las diez de la noche hasta las cuatro de la mañana del jueves. Mientras tanto, se han cerrado las puertas del Congreso de la República donde esta tarde debía haberse enfrentado a su tercera moción.
Algunos ministros han presentado su carta de renuncia al gabinete ministerial, como Alejandro Salas (Trabajo), Kurt Burneo, quien se desempeñaba como ministro de Economía, así como Manuel Rodríguez Cuadros, embajador de Perú ante la ONU. Por otra parte, el expresidente Ollanta Humala hizo público su rechazo a través de sus redes sociales, y ha calificado a Pedro Castillo de dictador. “Las Fuerzas Armadas le deben honor y lealtad a la patria y no a un dictador. Eso eres hoy Pedro Castillo”.
El tercer vicepresidente del Congreso, Alejandro Muñante, por su parte, ha anunciado que la sesión del Pleno se adelanta a las 12.30 para poder votar la moción contra Castillo. Varios analistas políticos aseguran que el mandatario ha tomado esta decisión para eludir a la justicia frente a los cargos de corrupción que se le imputan.
Castillo ha declarado que reorganizará el sistema de justicia, desde el Poder Judicial hasta otras instituciones como el Ministerio Público, el Tribunal Constitucional y la Junta Nacional de Justicia. Eso sí, ha dicho “que respeta escrupulosamente el modelo económico”. Todo eso sucede días después de la visita de una comitiva de alto nivel de la OEA, a petición del presidente, para evaluar sobre el terreno si en Perú estaba en peligro la democracia.