El periodista se pronunció sobre las consecuencias que viene dejando el ciclón Yaku a las familias peruanas. “Entonces vienen la lluvia, los ríos y la furia y nos recuerdan de qué barro estamos hechos”, refirió Hildebrandt.
César Hildebrandt se pronunció sobre los estragos que viene dejando el ciclón Yaku en distintas regiones del Perú, el cual ha provocado la reactivación de varias quebradas y huaicos, perjudicando a familias enteras producto de dicho fenómeno. En su reciente columna, el periodista comentó que “maldice a un sistema que normaliza estas condiciones”.
“Maldigo la crueldad de un país que vive, sin culpa, con millones de sus ciudadanos sometidos a la cadena perpetua de la extrema penuria. ¿Quién los juzgó? ¿Quiénes los condenaron? ¿Dónde fueron a parar sus apelaciones?”, expresó en su columna de Hildebrandt en sus Trece.
:Hildebrandt: “Otárola ha logrado un triunfo gracias al Congreso podrido que tenemos”
“No hubo debido proceso. Si eres hijo de miserables, se supone que no debiste nacer. Y si tuviste la imprudencia de nacer, pues lo casi seguro es que no abandonarás la gravedad jupiterina de la pobreza hereditaria. Esas son las reglas”, agregó.
En otro momento, el periodista comentó que los miles de damnificados por el ciclón Yaku son “los invisibles para la gran prensa hasta que llegan lodos y riadas” y que también son “los extras convertidos en protagonistas, los que emergen de una correntada”.
“Son los millones de condenados por el sistema que —dicen— nos llevó a la prosperidad. Son los que la derecha no quiere ver, los que los Fujimori escondió, lo que el momiaje de todos los colores quisiera desaparecer”, señala en otra parte de su semanario.
César Hildebrandt: “El 80% quiere que Dina Boluarte se vaya, y ella no escucha”
Finalmente, César Hildebrandt hizo hincapié en que “maldice un sistema que produce abismos y que luego los tapa con editoriales y estadísticas”.
“Pero entonces vienen la lluvia, los ríos y la furia y nos recuerdan de qué barro estamos hechos. La naturaleza, en todo caso, es mucho menos impía que el sistema que todos los días activa las quebradas de la injusticia”.
FUENTE: LA REPUBLICA