Las alzas en los productos básicos hacen que los jubilados tengan problemas para comprar, sus pensiones no se ajustan a los aumentos de la inflación situación que pone a este sector de la población en serios predicamentos
El fenómeno de la inflación ha puesto en apuros a millones de estadounidenses, quienes desde hace meses fueron advertidos por la clase empresarial y minorista que habría un fenómeno de las alzas en los principales productos básicos, así como también en el sector de los servicios a lo largo y ancho de todo el país que golpearían su cartera.
A pesar de que la recuperación económica está repuntando y que el empleo está al alza, el tema del aumento generalizado de los precios no sólo ha tenido un profundo impacto en el sector de la población que todavía no regresa a la fuerza laboral, ya está afectando a quienes son jubilados.
Por cómo está la situación nacional, mucho jubilados están batallando con sus compras de productos básicos, ya que la pensión que reciben mensualmente es, en la mayoría de los cosos, insuficiente para hacerle frente a las alzas de gasolina, pago de facturas y alimentos.
Incluso, de acuerdo con un informe de CNBC, hay personas retiradas que a pesar de recibir su jubilación deben acceder a programas de asistencia del gobierno, al ser insuficiente para cubrir gastos básicos. Por ello, muchos son acreedores a los beneficios mensuales del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP).
Pese a este alivio, muchos jubilados pueden estar aún más afectados, ya que pronto se expirarán los apoyos SNAP, algunos gobiernos estatales están poniendo fin a las declaraciones de emergencia conforme avanza la vacunación, así como también la mejora económica en el país.
De acuerdo con números oficiales del Departamento de Trabajo de Estados Unidos, el Índice de Precios al Consumidor, el cual mide el costo de los alimentos, la vivienda, la gasolina, los servicios públicos y otros bienes, correspondiente a mayo aumentó un 5% con respecto al año anterior.
Los precios de los alimentos se han incrementado un 2.2% durante los últimos 12 meses y la gasolina ha aumentado un 56.2%, recuperándose de las caídas de la pandemia. Si bien los funcionarios de la Reserva Federal han dicho que estos aumentos de precios son transitorios, a los jubilados todavía les preocupa que los precios suban.
Por lo general, los jubilados reciben pagos mensuales por concepto del Seguro Social, pero también por una pensión, teniendo pagos fijos, el problema de éstos es que, en una gran mayoría, no son ingresos altos y no pueden hacerle frente a las alzas de la inflación.
Según la Senior Citizens League, por cómo está el fenómeno en los aumentos generalizados, ya se está hablando de que es necesario un para el ajuste del costo de vida del Seguro Social de cara al 2022, esta alza podría representar, al menos, 5.3%, que de acuerdo con los expertos sería la de mayor impulso desde 2009.
Al margen de que esto sea una realidad o no, millones de jubilados que no tienen ahorros y sólo viven con su pensión mensual, se están convirtiendo en una población económicamente vulnerable y más ahora que la inflación está incrementando de forma exponencial.