La excandidata a la presidencia por Nuevo Perú, Verónika Mendoza, se pronunció en redes sociales sobre los allanamientos de la Policía a los locales de su partido y de la Confederación Campesina del Perú (CCP), ubicados en el Cercado de Lima.

“¡Basta de abuso! En los locales de Nuevo Perú y de la CCP están alojadas personas de diversas regiones que han venido a Lima a protestar legítima y pacíficamente. El derecho a la protesta es un derecho humano que no se suspende en estado de emergencia”, señaló Verónika Mendoza.

Por su parte, el partido Nuevo Perú denunció en redes sociales que, durante intervenciones, “no se respetan los derechos fundamentales”. “Policía no permite el ingreso de abogados ni testigos. Hay riesgo de siembra de material y violencia contra las personas alojadas en el interior”, indicaron.

Luego presentaron machetes con etiquetas recientemente adquiridas  y cajitas de tachuelas  igual, algunos medios señalan adquiridas en Totus. No se puede  cumplir con los mínimos modales, con la presencia del Ministerio Público, los abogados de la instituciones  afectadas, hacerlo de frente, sin actitudes matonescas , propias de una dictadura. Las autoridades que cumplen esta función tiene un alto déficit de cultura democrática y muestra  los  extremos a que pueden llegar,  si actúan así en la nariz de todo el mundo en el centro de  Lima, que será en ciudades  donde no hay prensa, no hay  instituciones que puedan velar por los derechos de las personas y más si estas son personas que no hablan el español. Hay la impresión que los que están empujando este tipo de accione son  personajes vinculados a la extrema derecha que por la cuota de poder  pactada,  están buscando  generar una reacción contra la Presidenta  y  ella se vea  arrinconada, limitada  a ejercer el poder que  la institucionalidad le otorga.

Algunos  analistas señalan que esta acción es una  acción provocadora,  tendiente a producir una ruptura  muy marcada entre este sector político y el gobierno de la Sra. Boluarte.  Utilizar a la Presidenta como  mascara , para aplicar  políticas de represión, intimidación,  afectación a  sectores   que tienen todo el derecho de  accionar  políticamente,  y pelear en las nueva elecciones el gobierno. Hay un temor  fundado  en esta derecha  extrema que  siendo el sector político de  Veronika ,  una institución democrática, moderna, y con profunda vocación de cambio, con gente preparada,  con dirigentes  con capacidades demostradas para debatir,  explicar y sustentar sus puntos de vista, cosa que no pueden hacer otros sectores, sin un peligro en  potencia para sus   intereses políticos.

En tanto, la congresista Ruth Luque indicó que “no es cierto que la ‘intervención’ fue con la Fiscalía”. “Yo estuve aquí y fui impedida de ingresar. Luego de las denuncias ingrese y posterior a mi visita llegó el Fiscal de DD.HH. y luego se hizo presente Fiscal contra terrorismo”, señaló.