¿Es usted de los que evita comer la tuna porque cree que las semillas pueden adherirse en las paredes del intestino? ¿O quizás es de aquellos que, antes de saborear el tomate, prefiere separar las pepitas para evitar posibles problemas en la vesícula o una diverticulitis? Especialistas resuelven tus dudas y mitos en esta nota. Todas las frutas y verduras aportan los nutrientes que el cuerpo humano necesita y, si bien algunos tienen más semillas en su interior, a veces con una consistencia dura o amarga, consumirlos no representa peligro para la salud, explicó a la agencia Andina la licenciada Bettyna Benavente Grandez, nutricionista del hospital Guillermo Almenara de EsSalud. Por lo general, agregó, las personas están habituadas a comer las fresas, el kiwi, la pitahaya, la granadilla, entre otras, con todas sus semillas, lo cual no sucede con la sandía, la papaya o la uva que, en las comúnmente se consume la pulpa y se descartan las pepas. Es una fruta con alto valor nutricional. Es rica en calcio, fósforo y vitaminas B y C. Ayuda a disminuir el colesterol, y regula los niveles de azúcar en la sangre.









