Gracias a una exitosa y oportuna intervención, médicos del Hospital Nacional Alberto Sabogal de EsSalud le salvaron la vida a Angie, una niña de tres años que había desarrollado un tumor maligno en el riñón que, de no haber sido retirado a tiempo, hubiera seguido creciendo hasta provocarle la muerte.
El doctor Omar Reyes Cruzado, médico oncólogo pediatra del mencionado nosocomio, explicó que la pequeña padecía el tumor de Wilms, un tipo de cáncer renal que afecta con más frecuencia a niños de corta edad.
“Angie llegó en agosto del año pasado con dolor abdominal recurrente, náuseas y vómitos. Tras ser evaluada y, previa ecografía al riñón, fue ingresada al hospital Sabogal para iniciar un ciclo de quimioterapias previas a la cirugía y así facilitar la intervención para retirarle el tumor”, señaló el galeno de EsSalud.
Luego de este procedimiento, que combate las células cancerosas del cuerpo, el riñón quedó limpio de la metástasis que padecía y, posteriormente, al terminar el primer bloque de quimioterapia, se realizó la cirugía donde se extirpó el tumor por completo a fines de diciembre.
Posteriormente, continuó un segundo bloque de 27 semanas de quimioterapia para asegurar la eliminación de cualquier rastro de la enfermedad. En sus controles tomográficos, ya no se han encontrado rastros de cáncer.
El especialista confirmó que la paciente está curada y por protocolo debe acudir a controles periódicos por oncología pediátrica entre otras especialidades. Remarcó que, si no era intervenida a tiempo, el tumor hubiera crecido tanto que la niña hubiese fallecido.
La primera complicación y causa de muerte de los pacientes con tumor de Wilms, es que se puede romper espontáneamente y causar un gran sangrado abdominal.
Jennifer Lino, madre de la pequeña Angie, comentó que tuvo que dejar a su bebita de una semana de nacida con su madre para salvar la vida de su niña en una larga lucha, donde prácticamente se internó en el hospital junto a su pequeña.
Un sacrificio que al final tuvo la mejor de las recompensas. “A los médicos, enfermeras y todo el personal de EsSalud, mil gracias por sus atenciones durante esta larga estadía, y a Dios, por ponerlos en nuestro camino”, expresó con emoción.
El doctor Reyes Cruzado recomendó a los padres de familia estar siempre atentos y si observan algo fuera de lo normal en sus niños, buscar la opinión de un especialista e incluso una segunda opinión. Para aquellos que ya tengan un diagnóstico de cáncer infantil, los instó a ser persistentes.
“Es una lucha larga y dura, donde tienen que acudir muchas veces al hospital, no solo por la quimioterapia, sino también por infecciones que aprovechan la baja de defensas, o también las múltiples transfusiones que se realizan de sangre y plaquetas, pero la satisfacción es grande para todos cuando los pequeños terminan su tratamiento con éxito, curados”, señaló el oncólogo pediatra.”
El área de Hospitalización de Oncopediatría del Hospital Sabogal tiene una capacidad de 8 camas, de las cuales 5 están ocupadas con pacientes oncológicos. Este número ha ido aumentando de acuerdo a la demanda ya que, anteriormente, los pacientes eran derivados al hospital Rebagliati que, junto con el Almenara, eran los únicos para el tratamiento de estos pacientes.