La diabetes se puede curar y llevar una vida sana! Un académico japonés de 105 años comparte el secreto de su victoria sobre la diabetes

Endocrinólogo japonés de renombre, inventor, científico, ganador del Premio Nobel, además de otros muchos galardones, Aretha Tanaka se jubiló a los 90 años, pero no se retiró ni en espíritu ni físicamente. Durante más de 7 años, mientras estaba jubilado, el Sr. Tanaka luchó contra la diabetes. Ahora tiene 105 años y su azúcar nunca ha superado la norma en 3 años. Es más, el profesor afirma que se siente con 60 años.

El Sr. Tanaka afirma que ha encontrado el secreto de la terapia de la diabetes y que ésta puede eliminarse en cualquier fase. Hasta ahora, el ex especialista en endocrinología confirma sus declaraciones.

Nuestro corresponsal consiguió una entrevista con el longevo. El Sr. Tanaka explica detalladamente su metodología para controlar la diabetes mellitus.

Corresponsal: Señor Tanaka, usted ha afirmado muchas veces que la limpieza del páncreas es el pilar de la terapia de la diabetes. ¿Por qué lo cree?

Aretha Tanaka: Es simple. El funcionamiento de todos los órganos y sistemas internos depende de la calidad del suministro de sangre. Al fin y al cabo, lo que es el suministro de sangre es la entrega de oxígeno y nutrientes y la entrada de dióxido de carbono y productos metabólicos a los órganos internos. En la infancia, la adolescencia y la juventud, nos movemos mucho, nuestros vasos sanguíneos son nuevos, elásticos, limpios, la nutrición de todos los órganos es máxima. Pero a medida que envejecemos, nos movemos cada vez menos, y nuestros vasos sanguíneos comienzan a ensuciarse. Esto se debe a diversos factores, no solo perjudiciales (como el tabaquismo, la mala alimentación, la ecología, el sedentarismo), sino también bastante naturales (la deposición de lípidos, por ejemplo, que se produce en todos).

¿Y qué son los vasos sanguíneos contaminados? Imagine que las tuberías no se han limpiado durante mucho tiempo. ¿Qué sucede en consecuencia? Como resultado, las tuberías se cubren con una gruesa capa de óxido, cal y otros sedimentos insolubles, y el agua misma se vuelve insípida. Lo mismo ocurre con los órganos internos. Cuando el colesterol u otras sustancias se depositan en los vasos sanguíneos, la sangre se contamina y el suministro de sangre no es el que debería ser. Como resultado, todos los órganos y sistemas se resienten y dejan de funcionar de la forma prevista por la naturaleza. Lo mismo ocurre con el páncreas. En él se produce la insulina, que descompone el azúcar en la sangre. Con los vasos sanguíneos obstruidos, el páncreas no puede hacer su trabajo y las células dejan de funcionar correctamente con la insulina.

Si se limpia el páncreas periódicamente, se puede vivir hasta los 120 años y no saber lo que es la diabetes. Y usted no tendrá ningún dolor, no tendrá dolor en ningún órgano y su cerebro funcionará bien. Es decir, gracias a la limpieza de los vasos sanguíneos es posible prolongar la vida y la salud en gran medida. Y no es solo una teoría. Mi jubilación coincidió con mi conocimiento personal de la enfermedad. Me diagnosticaron diabetes de tipo II. Y solo toda mi experiencia en endocrinología me ayudó a encontrar una solución.

Así es como se produce la contaminación gradual. Las manchas blancas son zonas problemáticas que impiden a las células interactuar con la insulina. Como resultado, hay un exceso de glucosa en el cuerpo.

Corresponsal: ¿Qué patologías conlleva un alto nivel de azúcar?

Aretha Tanaka: Afecta a todo el cuerpo. Pero, por supuesto, primero afecta a los órganos y sistemas que tienen un sistema vascular bien desarrollado.