El artista de manga y anime japonés Akira Toriyama, creador de obras tan conocidas internacionalmente como Dragon Ball o Dr Slump, falleció el pasado día 1 de marzo a los 68 años de edad a causa de un hematoma subdural agudo, según informó este jueves su propio estudio (Bird Studio).
¿Qué es y por qué se produce?
Según explica la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, un hematoma subdural es una acumulación de sangre entre la superficie del cerebro y la duramadre, una capa que lo recubre.
A menudo se produce como resultado de un traumatismo craneal grave, y de hecho es una de las complicaciones más letales. Cuando tiene lugar, la sangre inunda rápidamente la zona afectada, comprimiendo la zona y, frecuentemente, causando la muerte.
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En adultos más mayores, puede aparecer de manera secundaria a un golpe menos grave. Es estos casos, la cantidad de sangrado es menor y ocurre más lentamente, con lo que la condición puede pasar desapercibida varios días. Cuando esto sucede, se denomina hematoma subdural crónico.
Finalmente, algunos hematomas subdurales se producen espontáneamente (es decir, sin causa aparente). Aún así, hay algunos factores que aumentan el riesgo: el uso de medicamentos anticoagulantes, el consumo excesivo de alcohol, ciertos problemas médicos que afectan a la coagulación de la sangre, sufrir traumatismos craneales repetidos y la edad muy temprana o muy avanzada.
¿Cuáles son los síntomas?
La sintomatología varía en función del tamaño del hematoma y de la zona del cerebro afectada, pero puede incluir signos clínicos como:
Problemas de lenguaje.
Problemas de equilibrio.
Cefaleas.
Falta de energía.
Confusión.
Convulsiones.
Pérdida de conocimiento.
Náuseas y vómitos.
Debilidad o entumecimiento.
Problemas en la visión.
Cambios en el comportamiento.
Síntomas psicóticos.
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Particularmente en los bebés, puede aparecer:
Abultamiento de las fontanelas.
Separación de las suturas.
Dificultades en la alimentación.
Convulsiones.
Llanto.
Irritabilidad.
Aumento del tamaño de la cabeza.
Vómito persistente.
Aumento de la somnolencia.
A medida que avanza la condición, y en función de lo eficaz que resulte el tratamiento, pueden aparecer complicaciones como hernia cerebral, síntomas persistentes (pérdida de memoria, mareos, dolor de cabeza, problemas de concentración, ansiedad), convulsiones, debilidad temporal o permanente, entumecimiento y problemas de lenguaje.
¿Cómo se trata?
El hematoma subdural se considera una emergencia médica. Normalmente, se ataja mediante una cirugía urgente, que consiste en la perforación del cráneo para drenar la sangre.
